'Todos' en la Biblia
- 1.Gé 3:1-Éx 16:22
- 2.Éx 18:11-Números 4:9
- 3.Números 4:10-Deuteronomio 11:7
- 4.Deuteronomio 11:8-Jueces 3:29
- 5.Jueces 4:13-2 Samuel 7:7
- 6.2 Samuel 7:9-1 Reyes 15:5
- 7.1 Reyes 15:6-1 Crónicas 12:32
- 8.1 Crónicas 12:38-2 Crónicas 30:17
- 9.2 Crónicas 30:21-Job 13:4
- 10.Job 13:27-Salmos 76:5
- 11.Salmos 76:9-Proverbios 31:12
- 12.Eclesiastés 1:7-Isaías 55:1
- 13.Isaías 55:12-Jeremías 35:7
- 14.Jeremías 35:8-Ezequiel 21:12
- 15.Ezequiel 22:18-Joel 1:5
- 16.Joel 1:12-Marcos 1:5
- 17.Marcos 1:27-Lucas 21:4
- 18.Lucas 21:15-Hechos 19:10
- 19.Hechos 19:17-1 Corintios 16:16
- 20.1 Corintios 16:20-Filemón 1:5
- 21.Hebreos 1:6-Apocalipsis 22:21
Porque yo os daré boca y sabiduría, á la cual no podrán resistir ni contradecir todos los que se os opondrán.
Y seréis aborrecidos de todos por causa de mi nombre.
Y díjoles una parábola: Mirad la higuera y todos los árboles:
Porque como un lazo vendrá sobre todos los que habitan sobre la faz de toda la tierra.
Y habiendo encendido fuego en medio de la sala, y sentándose todos alrededor, se sentó también Pedro entre ellos.
Y dijeron todos: ¿Luego tú eres Hijo de Dios? Y él les dijo: Vosotros decís que yo soy.
Mas todos sus conocidos, y las mujeres que le habían seguido desde Galilea, estaban lejos mirando estas cosas.
Y volviendo del sepulcro, dieron nuevas de todas estas cosas á los once, y á todos los demás.
Y comenzando desde Moisés, y de todos los profetas, declarábales en todas las Escrituras lo que de él decían.
Este vino por testimonio, para que diese testimonio de la luz, para que todos creyesen por él.
Mas á todos los que le recibieron, dióles potestad de ser hechos hijos de Dios, á los que creen en su nombre:
Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia por gracia.
Y hecho un azote de cuerdas, echólos á todos del templo, y las ovejas, y los bueyes; y derramó los dineros de los cambiadores, y trastornó las mesas;
Mas el mismo Jesús no se confiaba á sí mismo de ellos, porque él conocía á todos,
Y vinieron á Juan, y dijéronle: Rabbí, el que estaba contigo de la otra parte del Jordán, del cual tú diste testimonio, he aquí bautiza, y todos vienen á él.
El que de arriba viene, sobre todos es: el que es de la tierra, terreno es, y cosas terrenas habla: el que viene del cielo, sobre todos es.
Para que todos honren al Hijo como honran al Padre. El que no honra al Hijo, no honra al Padre que le envió.
No os maravilléis de esto; porque vendrá hora, cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz;
Escrito está en los profetas: Y serán todos enseñados de Dios. Así que, todo aquel que oyó del Padre, y aprendió, viene á mí.
Jesús respondió, y díjoles: Una obra hice, y todos os maravilláis.
Todos los que antes de mí vinieron, ladrones son y robadores; mas no los oyeron las ovejas.
Mi Padre que me las dió, mayor que todos es y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre.
Si le dejamos así, todos creerán en él: y vendrán los Romanos, y quitarán nuestro lugar y la nación.
Y yo, si fuere levantado de la tierra, á todos traeré á mí mismo.
Dícele Jesús: El que está lavado, no necesita sino que lave los pies, mas está todo limpio: y vosotros limpios estáis, aunque no todos.
Porque sabía quién le había de entregar; por eso dijo: No estáis limpios todos.
No hablo de todos vosotros: yo sé los que he elegido: mas para que se cumpla la Escritura: El que come pan conmigo, levantó contra mí su calcañar.
En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros.
Como le has dado la potestad de toda carne, para que dé vida eterna á todos los que le diste.
Para que todos sean una cosa; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean en nosotros una cosa: para que el mundo crea que tú me enviaste.
Jesús le respondió: Yo manifiestamente he hablado al mundo: yo siempre he enseñado en la sinagoga y en el templo, donde se juntan todos los Judíos, y nada he hablado en oculto.
Entonces todos dieron voces otra vez, diciendo: No á éste, sino á Barrabás. Y Barrabás era ladrón.
Todos éstos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con María la madre de Jesús, y con sus hermanos.
Y fué notorio á todos los moradores de Jerusalem; de tal manera que aquel campo es llamado en su propia lengua, Acéldama, que es, Campo de sangre.
Y orando, dijeron: Tú, Señor, que conoces los corazones de todos, muestra cuál escoges de estos dos,
Y COMO se cumplieron los días de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos;
Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron á hablar en otras lenguas, como el Espíritu les daba que hablasen.
Y estaban atónitos y maravillados, diciendo: He aquí ¿no son "Galileos todos estos que hablan?
Y estaban todos atónitos y perplejos, diciendo los unos á los otros: ¿Qué quiere ser esto?
Entonces Pedro, poniéndose en pie con los once, alzó su voz, y hablóles diciendo: Varones Judíos, y todos los que habitáis en Jerusalem, esto os sea notorio, y oid mis palabras.
A este Jesús resucitó Dios, de lo cual todos nosotros somos testigos.
Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare.
Y todos los que creían estaban juntos; y tenían todas las cosas comunes;
Y vendían las posesiones, y las haciendas, y repartíanlas á todos, como cada uno había menester.
Y en la fe de su nombre, á éste que vosotros veis y conocéis, ha confirmado su nombre: y la fe que por él es, ha dado á este esta completa sanidad en presencia de todos vosotros.
Empero, Dios ha cumplido así lo que había antes anunciado por boca de todos sus profetas, que su Cristo había de padecer.
Y todos los profetas desde Samuel y en adelante, todos los que han hablado, han anunciado estos días.
Y Anás, príncipe de los sacerdotes, y Caifás, y Juan y Alejandro, y todos los que eran del linaje sacerdotal;
Sea notorio á todos vosotros, y á todo el pueblo de Israel, que en el nombre de Jesucristo de Nazaret, al que vosotros crucificasteis y Dios le resucitó de los muertos, por él este hombre está en vuestra presencia sano.
Diciendo: ¿Qué hemos de hacer á estos hombres? porque de cierto, señal manifiesta ha sido hecha por ellos, notoria á todos los que moran en Jerusalem, y no lo podemos negar.
Ellos entonces los despacharon amenazándolos, no hallando ningún modo de castigarlos, por causa del pueblo; porque todos glorificaban á Dios de lo que había sido hecho.
Y como hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaron la palabra de Dios con confianza.
Y los apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús con gran esfuerzo; y gran gracia era en todos ellos.
Que ningún necesitado había entre ellos: porque todos los que poseían heredades ó casas, vendiéndolas, traían el precio de lo vendido,
Entonces Ananías, oyendo estas palabras, cayó y espiró. Y vino un gran temor sobre todos los que lo oyeron.
Y vino un gran temor en toda la iglesia, y en todos los que oyeron estas cosas.
Y por las manos de los apóstoles eran hechos muchos milagros y prodigios en el pueblo; y estaban todos unánimes en el pórtico de Salomón.
Y aun de las ciudades vecinas concurría multitud á Jerusalem, trayendo enfermos y atormentados de espíritus inmundos; los cuales todos eran curados.
Entonces levantándose el príncipe de los sacerdotes, y todos los que estaban con él, que es la secta de los Saduceos, se llenaron de celo;
Y oído que hubieron esto, entraron de mañana en el templo, y enseñaban. Entre tanto, viniendo el príncipe de los sacerdotes, y los que eran con él, convocaron el concilio, y á todos los ancianos de los hijos de Israel, y enviaron á la cárcel para que fues
Porque antes de estos días se levantó Teudas, diciendo que era alguien; al que se agregó un número de hombres como cuatrocientos: el cual fué matado; y todos los que le creyeron fueron dispersos, y reducidos á nada.
Después de éste, se levantó Judas el Galileo en los días del empadronamiento, y llevó mucho pueblo tras sí. Pereció también aquél; y todos los que consintieron con él, fueron derramados.
Y todos los días, en el templo y por las casas, no cesaban de enseñar y predicar á Jesucristo.
Entonces todos los que estaban sentados en el concilio, puestos los ojos en él, vieron su rostro como el rostro de un ángel.
Y SAULO consentía en su muerte. Y en aquel día se hizo una grande persecución en la iglesia que estaba en Jerusalem; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles.
Al cual oían todos atentamente desde al más pequeño hasta el más grande, diciendo: Este es la gran virtud de Dios.
Entonces él se levantó, y fué: y he aquí un Etiope, eunuco, gobernador de Candace, reina de los Etiopes, el cual era puesto sobre todos sus tesoros, y había venido á adorar á Jerusalem,
Y aun aquí tiene facultad de los príncipes de los sacerdotes de prender á todos los que invocan tu nombre.
Y todos los que le oían estaban atónitos, y decían: ¿No es éste el que asolaba en Jerusalem á los que invocaban este nombre, y á eso vino acá, para llevarlos presos á los príncipes de los sacerdotes?
Y como vino á Jerusalem, tentaba de juntarse con los discípulos; mas todos tenían miedo de él, no creyendo que era discípulo.
Y aconteció que Pedro, andándolos á todos, vino también á los santos que habitaban en Lydda.
Y viéronle todos los que habitaban en Lydda y en Sarona, los cuales se convirtieron al Señor.
Entonces echados fuera todos, Pedro puesto de rodillas, oró; y vuelto al cuerpo, dijo: Tabita, levántate. Y ella abrió los ojos, y viendo á Pedro, incorporóse.
En el cual había de todos los animales cuadrúpedos de la tierra, y reptiles, y aves del cielo.
Así que, luego envié á ti; y tú has hecho bien en venir. Ahora pues, todos nosotros estamos aquí en la presencia de Dios, para oir todo lo que Dios te ha mandado.
Envió palabra Dios á los hijos de Israel, anunciando la paz por Jesucristo; éste es el Señor de todos.
Cuanto á Jesús de Nazaret; cómo le ungió Dios de Espíritu Santo y de potencia; el cual anduvo haciendo bienes, y sanando á todos los oprimidos del diablo; porque Dios era con él.
A éste dan testimonio todos los profetas, de que todos los que en él creyeren, recibirán perdón de pecados por su nombre.
Estando aún hablando Pedro estas palabras, el Espíritu Santo cayó sobre todos los que oían el sermón.
El cual, como llegó, y vió la gracia de Dios, regocijóse; y exhortó á todos á que permaneciesen en el propósito del corazón en el Señor.
Porque los que habitaban en Jerusalem, y sus príncipes, no conociendo á éste, y las voces de los profetas que se leen todos los sábados, condenándo les, las cumplieron.
Y los Gentiles oyendo esto, fueron gozosos, y glorificaban la palabra del Señor: y creyeron todos los que estaban ordenados para vida eterna.
Ellos, pues, habiendo sido acompañados de la iglesia, pasaron por la Fenicia y Samaria, contando la conversión de los Gentiles; y daban gran gozo á todos los hermanos.
Para que el resto de los hombres busque al Señor, Y todos los Gentiles, sobre los cuales es llamado mi nombre, Dice el Señor, que hace todas estas cosas.
Este quiso Pablo que fuese con él; y tomándole, le circuncidó por causa de los Judíos que estaban en aquellos lugares; porque todos sabían que su padre era Griego.
Entonces fué hecho de repente un gran terremoto, de tal manera que los cimientos de la cárcel se movían; y luego todas las puertas se abrieron, y las prisiones de todos soltaron.
Mas Pablo clamó á gran voz, diciendo: No te hagas ningún mal; que todos estamos aquí.
Y le hablaron la palabra del Señor, y á todos los que estan en su casa.
Y tomándolos en aquella misma hora de la noche, les lavó los azotes; y se bautizó luego él, y todos los suyos.
A los cuales Jasón ha recibido; y todos estos hacen contra los decretos de César, diciendo que hay otro rey, Jesús.
(Entonces todos los Atenienses y los huéspedes extranjeros, en ningun otra cosa entendían, sino ó en decir ó en oir alguna cosa nueva.)
Ni es honrado con manos de hombres, necesitado de algo; pues él da á todos vida, y respiración, y todas las cosas;
Empero Dios, habiendo disimulado los tiempos de esta ignorancia, ahora denuncia á todos los hombres en todos los lugares que se arrepientan:
Por cuanto ha establecido un día, en el cual ha de juzgar al mundo con justicia, por aquel varón al cual determinó; dando fe á todos con haberle levantado de los muertos.
Y hallando á un Judío llamado Aquila, natural del Ponto, que hacía poco que había venido de Italia, y á Priscila su mujer, (porque Claudio había mandado que todos los Judíos saliesen de Roma) se vino á ellos;
Y disputaba en la sinagoga todos los sábados, y persuadía á Judíos y á Griegos.
Entonces todos los Griegos tomando á Sóstenes, prepósito de la sinagoga, le herían delante del tribunal: y á Galión nada se le daba de ello.
Y habiendo estado allí algún tiempo, partió, andando por orden la provincia de Galacia, y la Phrygia, confirmando á todos los discípulos.
Y eran en todos como unos doce hombres.
Y esto fué por espacio de dos años; de manera que todos los que habitaban en Asia, Judíos y Griegos, oyeron la palabra del Señor Jesús.
Resutados de la Búsqueda continuados...
- 1.Gé 3:1-Éx 16:22
- 2.Éx 18:11-Números 4:9
- 3.Números 4:10-Deuteronomio 11:7
- 4.Deuteronomio 11:8-Jueces 3:29
- 5.Jueces 4:13-2 Samuel 7:7
- 6.2 Samuel 7:9-1 Reyes 15:5
- 7.1 Reyes 15:6-1 Crónicas 12:32
- 8.1 Crónicas 12:38-2 Crónicas 30:17
- 9.2 Crónicas 30:21-Job 13:4
- 10.Job 13:27-Salmos 76:5
- 11.Salmos 76:9-Proverbios 31:12
- 12.Eclesiastés 1:7-Isaías 55:1
- 13.Isaías 55:12-Jeremías 35:7
- 14.Jeremías 35:8-Ezequiel 21:12
- 15.Ezequiel 22:18-Joel 1:5
- 16.Joel 1:12-Marcos 1:5
- 17.Marcos 1:27-Lucas 21:4
- 18.Lucas 21:15-Hechos 19:10
- 19.Hechos 19:17-1 Corintios 16:16
- 20.1 Corintios 16:20-Filemón 1:5
- 21.Hebreos 1:6-Apocalipsis 22:21
Resultados de Búsqueda por Versiones
- J2000 (2138)
- LBDA (1999)
- NBLH (2006)
- RV (2043)
- SEV (2135)
- RV1909 (2046)
Resultados de Búsqueda por Libro
- Génesis (73)
- Éxodo (63)
- Levítico (27)
- Números (110)
- Deuteronomio (74)
- Josué (48)
- Jueces (46)
- Rut (1)
- 1 Samuel (51)
- 2 Samuel (58)
- 1 Reyes (67)
- 2 Reyes (52)
- 1 Crónicas (71)
- 2 Crónicas (88)
- Esdras (24)
- Nehemías (15)
- Ester (25)
- Job (33)
- Salmos (156)
- Proverbios (18)
- Eclesiastés (21)
- Cantares (4)
- Isaías (98)
- Jeremías (143)
- Lamentaciones (15)
- Ezequiel (84)
- Daniel (26)
- Oseas (7)
- Joel (10)
- Amós (9)
- Abdías (1)
- Miqueas (7)
- Nahúm (6)
- Habacuc (5)
- Sofonías (10)
- Zacarías (11)
- Malaquías (3)
- Mateo (39)
- Marcos (36)
- Lucas (74)
- Juan (23)
- Hechos (99)
- Romanos (31)
- 1 Corintios (40)
- 2 Corintios (14)
- Gálatas (12)
- Efesios (12)
- Filipenses (14)
- Colosenses (6)
- 1 Tesalonicenses (11)
- 2 Tesalonicenses (6)
- 1 Timoteo (11)
- 2 Timoteo (8)
- Tito (3)
- Filemón (1)
- Hebreos (18)
- Santiago (5)
- 1 Pedro (4)
- 2 Pedro (1)
- 1 Juan (1)
- 2 Juan (1)
- 3 Juan (1)
- Judas (2)
- Apocalipsis (13)
Artículos Relacionados
- Dios quiere salvar a todos
- La alabanza, la forma y los métodos de
- La muerte de todos los varones
- La profecía, Métodos de OT
- La salvación a todos los hombres, posible
- Martirio, métodos de