'Vosotros' en la Biblia
- 1.Gé 9:7-Levítico 25:12
- 2.Levítico 25:23-Deuteronomio 11:23
- 3.Deuteronomio 11:25-Jueces 14:12
- 4.Jueces 14:13-2 Crónicas 13:9
- 5.2 Crónicas 13:11-Isaías 43:12
- 6.Isaías 43:14-Jeremías 46:4
- 7.Jeremías 49:30-Hageo 2:4
- 8.Hageo 2:5-Marcos 4:11
- 9.Marcos 4:24-Juan 3:28
- 10.Juan 4:20-Hechos 2:23
- 11.Hechos 2:33-1 Corintios 2:2
- 12.1 Corintios 2:3-2 Corintios 8:22
- 13.2 Corintios 8:23-Colosenses 1:21
- 14.Colosenses 1:24-Santiago 5:4
- 15.Santiago 5:8-Apocalipsis 22:21
En cuanto a Tito, es mi compañero y coadjutor para con vosotros; o acerca de nuestros hermanos, que son apóstoles de las Iglesias, y la gloria del Cristo.
Mostrad pues, para con ellos en la faz de las Iglesias la prueba de vuestra caridad, y de nuestro gloriarnos acerca de vosotros.
Mas he enviado los hermanos, para que nuestro gloriarnos de vosotros no sea vano en esta parte; para que, como lo he dicho, estéis apercibidos;
no sea que, si vinieren conmigo macedonios, y os hallaren desprevenidos, nos avergoncemos nosotros, por no decir vosotros, de esta nuestra confianza.
Por tanto, tuve por cosa necesaria exhortar a los hermanos que fueran primero a vosotros, y prepararan primero vuestra bendición antes prometida para que esté aparejada como de bendición, y no como de mezquindad.
Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia; a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo que basta, abundéis para toda buena obra;
y en la oración de ellos a favor vuestro, los cuales os quieren a causa de la eminente gracia de Dios en vosotros.
Os ruego, sin embargo, yo Pablo, por la mansedumbre y modestia del Cristo, (que presente ciertamente soy bajo entre vosotros, mas ausente soy confiado con vosotros);
Pero nosotros no nos gloriaremos más allá de nuestra medida, sino conforme a la medida de la regla, de la medida que Dios nos repartió, para llegar aun hasta vosotros.
Porque no nos extendemos demasiado para llegar hasta vosotros; porque también hasta vosotros hemos llegado con el Evangelio del Cristo;
no gloriándonos más allá de nuestra medida en trabajos ajenos; sino teniendo esperanza del crecimiento de vuestra fe, que seremos muy engrandecidos entre vosotros, conforme a nuestra regla.
Y que anunciaremos el Evangelio a los que están más allá de vosotros, sin entrar en la medida \'
Porque aunque soy basto en la palabra, empero no en la ciencia; mas en todo somos ya del todo manifiestos a vosotros.
¿Por ventura pequé humillándome a mí mismo, para que vosotros fuerais ensalzados? Porque os he predicado el Evangelio de Dios gratuitamente.
He sacado de las otras Iglesias, recibiendo salario para ministraros a vosotros.
Y estando con vosotros y teniendo necesidad, a ninguno de vosotros fui carga; porque lo que me faltaba, lo suplieron los hermanos que vinieron de Macedonia; y en todo me guardé de seros gravoso, y me guardaré.
Porque de buena gana toleráis los locos, siendo vosotros sabios;
He sido loco (en gloriarme); vosotros me constreñisteis; pues yo había de ser alabado de vosotros, porque en nada he sido menos que los grandiosos apóstoles, aunque nada soy.
Con todo esto, las señales de apóstol han sido hechas entre vosotros en toda paciencia, en señales, y en prodigios, y en potencia.
He aquí estoy aparejado para ir a vosotros la tercera vez, y no os seré gravoso; porque no busco vuestras cosas, sino a vosotros; porque no han de atesorar los hijos para los padres, sino los padres para los hijos.
¿Por ventura os he engañado por alguno de los que he enviado a vosotros?
¿O pensáis aún que nos excusamos con vosotros? Delante de Dios en Cristo hablamos; mas todo, muy amados, por vuestra edificación.
Porque temo que cuando llegare, no os halle tales como quiero, y yo sea hallado de vosotros cual no queréis; para que por ventura no haya entre vosotros contiendas, envidias, iras, disensiones, detracciones, murmuraciones, rumores, bandos;
para que cuando volviere, no me humille Dios entre vosotros, y haya de llorar por muchos de los que antes habrán pecado, y no se han enmendado de la inmundicia y fornicación y deshonestidad que han cometido.
Esta tercera vez voy a vosotros. En la boca de dos o de tres testigos consistirá toda palabra.
pues buscáis una prueba de Cristo que habla en mí, el cual no es flaco para con vosotros, antes es poderoso en vosotros.
Porque aunque fue colgado en un madero por flaqueza, sin embargo vive por potencia de Dios. Por lo cual también nosotros somos flacos en él, sin embargo viviremos con él por la potencia de Dios en vosotros.
Examinaos a vosotros mismos si estáis en la fe; probaos a vosotros mismos. ¿No os conocéis a vosotros mismos, si Jesús, el Cristo, está en vosotros? Si ya no sois reprobados.
Pero oramos a Dios que ninguna cosa mala hagáis; no para que nosotros seamos hallados aprobados, sino para que vosotros hagáis lo que es bueno, aunque nosotros seamos tenidos por reprobados.
Por lo cual nos gozamos que seamos nosotros flacos, y que vosotros seáis poderosos; y aun oramos por vuestra perfección.
Resta, hermanos, que tengáis gozo, seáis perfectos, tengáis consolación, sintáis una misma cosa, tengáis paz; y el Dios de paz y de caridad sea con vosotros.
La gracia del Señor Jesús, el Cristo, y la caridad de Dios, y la comunicación del Espíritu Santo sea con todos vosotros. Amén.
Gracia sea a vosotros, y paz de Dios el Padre, y del Señor nuestro, Jesús el Cristo,
a los cuales ni aun por una hora accedimos a someternos, para que la verdad del Evangelio permaneciera con vosotros.
¡Oh gálatas insensatos! ¿Quién os hechizó, para no obedecer a la Verdad, ante cuyos ojos Jesús, el Cristo fue ya descrito como colgado en el madero entre vosotros?
Esto solo quiero saber de vosotros: ¿Recibisteis el Espíritu por las obras de la ley, o por el oído obediente de la fe?
Aquel, pues, que os da el Espíritu, y obra las maravillas entre vosotros ¿lo hace por las obras de la ley, o por el oír obediente de la fe?
No hay aquí judío, ni griego; no hay siervo, ni libre; no hay macho, ni hembra: porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús.
Y si vosotros sois de Cristo, ciertamente la Simiente de Abraham sois, y conforme a la promesa, los herederos.
Temo por vosotros, que haya trabajado en vano en vosotros.
Hermanos, os ruego, sed como yo, porque yo soy como vosotros; ningún agravio me habéis hecho.
Que vosotros sabéis que por flaqueza de carne os anuncié el Evangelio al principio;
Tienen celos de vosotros, pero no para bien; antes os quieren echar fuera para que vosotros los celéis a ellos.
Bueno es ser celosos en bien siempre; y no solamente cuando estoy presente con vosotros.
Hijitos míos, que vuelvo otra vez a estar de parto de vosotros, hasta que Cristo sea formado en vosotros;
querría cierto estar ahora con vosotros, y mudar mi voz; porque estoy avergonzado de vosotros.
Vosotros corríais bien, ¿quién os embarazó para no obedecer a la verdad?
Yo confío de vosotros en el Señor, que ninguna otra cosa sentiréis; mas el que os inquieta, llevará el juicio, quienquiera que él sea.
Porque vosotros, hermanos, a libertad habéis sido llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión a la carne, sino servíos por la caridad los unos a los otros.
Hermanos, si alguno fuere tomado en alguna falta, vosotros que sois espirituales, restaurad al tal con el espíritu de mansedumbre; considerándote a ti mismo, para que tú no seas también tentado.
Porque ni aun los mismos que se circuncidan guardan la ley; sino que quieren que vosotros seáis circuncidados, para gloriarse en vuestra carne.
En el cual esperasteis también vosotros oyendo la Palabra de Verdad, el Evangelio de vuestra salud; en el cual también desde que creísteis, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la Promesa,
no ceso de dar gracias por vosotros, haciendo memoria de vosotros en mis oraciones,
Y él os hizo vivir a vosotros, estando muertos en vuestros delitos y pecados,
Porque por gracia sois salvos por la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios;
Por tanto, acordaos que en otro tiempo vosotros erais gentiles en carne, que erais llamados incircuncisión de la que se llama circuncisión en carne, la cual se hace con mano;
Pero ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo estabais lejos, habéis sido hechos cercanos por la sangre del Cristo.
Y vino, y anunció la paz a vosotros que estabais lejos, y a los que estaban cerca;
en el cual vosotros también sois juntamente edificados, por morada de Dios en el Espíritu.
Por causa de esto yo Pablo, prisionero, de Cristo Jesús para vosotros los gentiles,
si empero habéis oído la dispensación de la gracia de Dios que me ha sido dada en vosotros,
Por tanto, pido que no desmayéis por causa de mis tribulaciones por vosotros, lo cual es vuestra gloria.
un Dios y Padre de todos, el cual es sobre todas las cosas, y por todas las cosas, y en todos vosotros.
Toda amargura, enojo, ira, gritería, y maledicencia sea quitada de vosotros y toda malicia;
Pero fornicación y toda inmundicia, o avaricia, ni aun se nombre entre vosotros, como conviene a los santos;
hablando entre vosotros con salmos, y con himnos, y canciones espirituales, cantando y alabando al Señor en vuestros corazones;
Así también haga cada uno de vosotros, cada uno ame a su mujer como a sí mismo; y la mujer que tenga en reverencia a su marido.
Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos; sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor.
Y vosotros, amos, haced a ellos lo mismo, dejando las amenazas; sabiendo que el Señor de ellos y vuestro está en los cielos, y que no hay acepción de personas con él.
Mas para que también vosotros sepáis mis negocios, y cómo lo paso, todo os lo hará saber Tíquico, hermano amado y fiel siervo en el Señor,
Doy gracias a mi Dios en toda memoria de vosotros,
siempre en todas mis oraciones haciendo oración por todos vosotros con gozo,
Confiando de esto: que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesús el Cristo;
como me es justo sentir esto de todos vosotros, por cuanto os tengo en el corazón; y en mis prisiones, y en la defensa y confirmación del Evangelio, sois todos vosotros compañeros de mi gracia.
Porque Dios me es testigo de cómo os quiero a todos vosotros en las entrañas de Jesús el Cristo.
pero quedar en la carne es más necesario por causa de vosotros.
Y confiado en esto, sé que quedaré, que aún permaneceré con todos vosotros, para provecho vuestro y gozo de la fe;
para que puedan gloriarsen más en Cristo Jesús por mi venida otra vez a vosotros.
Solamente que converséis como es digno del Evangelio del Cristo; para que, o sea que vaya a veros, o que esté ausente, oiga de vosotros que estáis firmes en un mismo espíritu, unánimes obrando juntamente por la fe del Evangelio,
y en nada intimidados de los que se oponen; que a ellos ciertamente es indicio de perdición, mas a vosotros de salud; y esto de Dios;
porque a vosotros es concedido acerca de Cristo, no sólo que creáis en él, sino también que padezcáis por él,
Por tanto, si hay en vosotros alguna consolación en el Cristo; si algún refrigerio de caridad; si alguna comunión del Espíritu; si algunas entrañas y misericordias,
Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en el Cristo Jesús;
porque Dios es el que en vosotros obra así el querer como el hacer, por su buena voluntad.
Y aun si soy derramado en libación sobre el sacrificio y servicio de vuestra fe, me gozo y congratulo por todos vosotros.
Porque a ninguno tengo tan unánime, y que con sincera afición esté solícito por vosotros.
y confío en el Señor que yo también iré pronto a vosotros.
porque tenía gran deseo de veros a todos vosotros, y gravemente se angustió porque habíais oído que había enfermado.
Resta, hermanos, que os gocéis en el Señor. A mí, a la verdad, no me es molesto el escribiros las mismas cosas, y para vosotros es seguro.
Lo que aprendisteis y recibisteis y oísteis y visteis en mí, esto haced; y el Dios de paz estará con vosotros.
Y sabéis también vosotros, oh filipenses, que al principio del Evangelio, cuando partí de Macedonia, ninguna Iglesia me comunicó en razón de dar y recibir, sino vosotros solos.
La gracia del Señor nuestro, Jesús el Cristo sea con todos vosotros. Amén.
A los santos y hermanos fieles en Cristo que están en Colosas: Gracia y paz a vosotros de Dios Padre nuestro, y del Señor Jesús el Cristo.
Damos gracias al Dios y Padre del Señor nuestro Jesús el Cristo, siempre orando por vosotros;
el cual ha llegado hasta vosotros, como está por todo el mundo; y fructifica, como también en vosotros, desde el día que oísteis y conocisteis la gracia de Dios en verdad,
como lo habéis aprendido de Epafras, nuestro consiervo amado, el cual es para vosotros un fiel ministro de Cristo Jesús;
Por lo cual también nosotros, desde el día que lo oímos, no cesamos de orar por vosotros, y de pedir a Dios que seáis llenos del conocimiento de su voluntad, en toda sabiduría y entendimiento espiritual;
A vosotros también, que erais en otro tiempo extraños y enemigos de ánimo en malas obras, ahora empero os ha reconciliado
Resutados de la Búsqueda continuados...
- 1.Gé 9:7-Levítico 25:12
- 2.Levítico 25:23-Deuteronomio 11:23
- 3.Deuteronomio 11:25-Jueces 14:12
- 4.Jueces 14:13-2 Crónicas 13:9
- 5.2 Crónicas 13:11-Isaías 43:12
- 6.Isaías 43:14-Jeremías 46:4
- 7.Jeremías 49:30-Hageo 2:4
- 8.Hageo 2:5-Marcos 4:11
- 9.Marcos 4:24-Juan 3:28
- 10.Juan 4:20-Hechos 2:23
- 11.Hechos 2:33-1 Corintios 2:2
- 12.1 Corintios 2:3-2 Corintios 8:22
- 13.2 Corintios 8:23-Colosenses 1:21
- 14.Colosenses 1:24-Santiago 5:4
- 15.Santiago 5:8-Apocalipsis 22:21