'Sea' en la Biblia
Porque la Escritura dice de Faraón: Que para esto mismo te he levantado, para mostrar en ti mi potencia, y que mi Nombre sea anunciado por toda la tierra.
¿O quién le dio a él primero, para que le sea pagado?
Porque de él, y por él, y en él, son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén.
Y no os conforméis a este siglo; mas trasformaos por la renovación de vuestra alma, para que experimentéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
El amor sea sin fingimiento, aborreciendo lo malo, llegándoos a lo bueno;
Bueno es no comer carne, ni beber vino, ni nada en que tu hermano tropiece, o se ofenda o sea enfermo.
Por ser ministro de Jesús el Cristo a los gentiles, ministrando el Evangelio de Dios, para que la ofrenda de los gentiles sea agradable, santificada por el Espíritu Santo.
Que sea librado de los rebeldes que están en Judea, y que la ofrenda de mi servicio a los santos en Jerusalén sea acepta;
para que con gozo llegue a vosotros por la voluntad de Dios, y que sea recreado juntamente con vosotros.
Y el Dios de paz sea con todos vosotros. Amén.
Y el Dios de paz quebrante presto a Satanás debajo de vuestros pies. La gracia del Señor nuestro Jesús, el Cristo, sea con vosotros.
La gracia del Señor nuestro Jesús, el Cristo, sea con todos vosotros. Amén.
al solo Dios sabio, sea gloria por Jesús, el Cristo, para siempre. Amén.
Porque no me envió Cristo a bautizar, sino a predicar el Evangelio; no en sabiduría de palabras, para que no sea hecha vana el madero del Cristo.
la obra de cada uno será manifestada, porque el día la declarará; porque por el fuego será manifestada; y la obra de cada uno cual sea, el fuego hará la prueba.
sea Pablo, sea Apolos, sea Cefas, sea el mundo, sea la vida, sea la muerte, sea lo presente, sea lo por venir; que todo es vuestro,
Se requiere sin embargo en los dispensadores, que cada uno sea hallado fiel.
Pero esto, hermanos, he pasado por ejemplo en mí y en Apolos, por amor de vosotros; para que en nosotros no aprendáis más allá de lo que está escrito, no sea que por causa de uno, os envanezcáis unos contra otros.
el tal sea entregado a Satanás para muerte de la carne, para que el espíritu sea salvo en el día del Señor Jesús.
La mujer casada está atada a la ley, mientras vive su marido; mas si su marido muriere, libre es; cásese con quien quisiere, con tal que sea en el Señor.
Pero mirad que esta libertad vuestra no sea tropezadero a los que son débiles.
La misma naturaleza ¿no os enseña que al hombre sea deshonesto criar cabello?
Si hablare alguno en lengua extraña, sea esto por dos, o a lo más tres, y por turno; mas uno interprete.
Porque, o sea yo o sean ellos, así predicamos, y así habéis creído.
Mas luego que todas las cosas le fueren sujetas, entonces también el mismo Hijo se sujetará al que le sujetó a él todas las cosas, para que Dios sea todo en todos.
Porque es necesario que esto corruptible sea vestido de incorrupción, y esto mortal sea vestido de inmortalidad.
El que no amare al Señor Jesús, el Cristo, sea anatema. Nuestro Señor ha venido.
La gracia del Señor Jesús el Cristo sea con vosotros.
Mi caridad en Cristo Jesús sea con todos vosotros. Amén.
Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesús, el Cristo, el Padre de misericordias, y el Dios de toda consolación,
para que, al contrario, vosotros más bien lo perdonéis y consoléis, porque por ventura no sea el tal consumido con demasiada tristeza.
Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la alteza sea de la virtud de Dios, y no de nosotros.
llevando siempre por todas partes la mortificación del Señor Jesús en nuestro cuerpo, para que también la vida de Jesús sea manifestada en nuestros cuerpos.
Porque nosotros que vivimos, siempre somos entregados a muerte por Jesús, para que también la vida de Jesús sea manifestada en nuestra carne mortal.
No dando a nadie ningún escándalo, para que el ministerio no sea vituperado;
Ahora pues, llevad también a cabo el hecho, para que como fue pronto el ánimo de la voluntad, así también sea en cumplirlo de lo que tenéis.
Mas he enviado los hermanos, para que nuestro gloriarnos de vosotros no sea vano en esta parte; para que, como lo he dicho, estéis apercibidos;
no sea que, si vinieren conmigo macedonios, y os hallaren desprevenidos, nos avergoncemos nosotros, por no decir vosotros, de esta nuestra confianza.
ruego pues, que cuando estuviere presente, no sea necesario ser atrevido con la confianza de que soy estimado usar con algunos, que nos tienen como si anduviésemos según la carne.
Pero yo de muy buena gana me desprenderé y seré totalmente desprendido por vuestras almas, aunque amándoos más, sea amado menos.
Pero sea así, yo no os he agravado; sino que, como soy astuto, os he tomado por engaño.
Porque temo que cuando llegare, no os halle tales como quiero, y yo sea hallado de vosotros cual no queréis; para que por ventura no haya entre vosotros contiendas, envidias, iras, disensiones, detracciones, murmuraciones, rumores, bandos;
Resta, hermanos, que tengáis gozo, seáis perfectos, tengáis consolación, sintáis una misma cosa, tengáis paz; y el Dios de paz y de caridad sea con vosotros.
La gracia del Señor Jesús, el Cristo, y la caridad de Dios, y la comunicación del Espíritu Santo sea con todos vosotros. Amén.
Gracia sea a vosotros, y paz de Dios el Padre, y del Señor nuestro Jesús, el Cristo,
Mas aun si nosotros o un ángel del cielo os anunciare otro Evangelio del que os hemos anunciado, sea anatema.
Como antes hemos dicho, también ahora lo decimos otra vez: Si alguno os anunciare otro Evangelio del que habéis recibido, sea anatema.
Hermanos, (hablo como hombre): Aunque un pacto sea de hombre, una vez ratificado, nadie lo cancela, ni le añade.
Hijitos míos, que vuelvo otra vez a estar de parto de vosotros, hasta que Cristo sea formado en vosotros;
Yo confío de vosotros en el Señor, que ninguna otra cosa sentiréis; mas el que os inquieta, llevará el juicio, quienquiera que él sea.
De aquí en adelante nadie me sea molesto; porque yo traigo en mi cuerpo las marcas del Señor Jesús.
Hermanos, la gracia del Señor nuestro, Jesús, el Cristo, sea con vuestro espíritu. Amén.
alumbrando los ojos de vuestro entendimiento, para que sepáis cuál sea la esperanza de su llamado, y cuáles sean las riquezas de la gloria de su herencia en los santos,
y cuál sea aquella supereminente grandeza de su potencia en nosotros los que creemos, por la operación de la potencia de su fortaleza,
(leyendo lo cual podéis entender cuál sea mi inteligencia en el misterio del Cristo;)
y de aclarar a todos cuál sea la comunión del misterio escondido desde los siglos en Dios, que creó todas las cosas por Jesús, el Cristo.
Para que la multiforme sabiduría de Dios sea ahora notificada por la Iglesia a los principados y potestades en los cielos,
podáis bien comprender con todos los santos cuál sea la anchura y la longitud y la profundidad y la altura,
a él sea gloria en la Iglesia por el Cristo Jesús, por todas las generaciones de los siglos de los siglos. Amén.
Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para edificación, para que dé gracia a los oyentes.
Toda amargura, y enojo, e ira, y gritería, y maledicencia sea quitada de vosotros, y toda malicia;
Por tanto, no seáis imprudentes, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor.
sabiendo que el bien que cada uno hiciere, esto recibirá del Señor, sea siervo o sea libre.
y por mí, para que me sea dada palabra en el abrir de mi boca con confianza, para hacer notorio el misterio del Evangelio,
Paz sea a los hermanos y caridad con fe, por Dios Padre y el Señor Jesús, el Cristo.
Gracia sea con todos los que aman al Señor nuestro, Jesús, el Cristo en incorrupción. Amén.
Solamente que converséis como es digno del Evangelio del Cristo; para que, o sea que vaya a veros, o que esté ausente, oiga de vosotros que estáis firmes en un mismo espíritu, unánimes obrando juntamente por la fe del Evangelio,
No que ya lo haya alcanzado, ni que ya sea perfecto; mas sigo para asir de aquello como también soy asido del Cristo Jesús.
Vuestra modestia sea conocida de todos los hombres. El Señor está cerca.
Al Dios pues y Padre nuestro sea gloria por los siglos de los siglos. Amén.
La gracia del Señor nuestro Jesús, el Cristo sea con todos vosotros. Amén.
Y todo lo que hagáis, sea de palabra, o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias al Dios y Padre por él.
Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal; para que sepáis cómo os conviene responder a cada uno.
Y cuando esta carta fuere leída entre vosotros, haced que también sea leída en la Iglesia de los laodicenses; y la de Laodicea que la leáis también vosotros.
La salutación de mi mano, de Pablo. Acordaos de mis prisiones. La gracia sea con vosotros. Amén.
Por lo cual, también yo, no esperando más, he enviado a reconocer vuestra fe, no sea que os haya tentado el Tentador, y que nuestro trabajo haya sido en vano.
el cual murió por nosotros, para que sea que velemos, o que durmamos, vivamos juntamente con él.
Y el Dios de paz os santifique completamente; para que vuestro espíritu, alma y cuerpo sea guardado entero sin reprensión para la venida del Señor nuestro, Jesús, el Cristo.
Os amonesto por el Señor, que esta carta sea leída a todos los santos hermanos.
La gracia del Señor nuestro Jesús, el Cristo, sea con vosotros. Amén.
para que el Nombre del Señor nuestro, Jesús, el Cristo sea clarificado en vosotros, y vosotros en él, por la gracia de nuestro Dios y del Señor Jesús, el Cristo.
Porque ya está obrando el misterio de iniquidad, solamente que el que ahora domina, dominará hasta que sea quitado;
Así que, hermanos, estad firmes , y retened la doctrina que habéis aprendido, sea por palabra, o por carta nuestra.
Resta, hermanos, que oréis por nosotros, que la Palabra del Señor corra y sea hecha ilustre así como entre vosotros;
Y el mismo Señor de paz os dé siempre paz en toda manera. El Señor sea con todos vosotros.
La gracia de nuestro Señor Jesús el Cristo sea con todos vosotros. Amén.
Por tanto, al Rey para siempre, inmortal, invisible, al único sabio Dios, sea honor y gloria por los siglos de los siglos. Amén.
Conviene, pues, que el obispo sea irreprensible, marido de una sola mujer, vigilante, templado, de afectos mundanos mortificados, hospedador, apto para enseñar;
En estas cosas ocúpate con cuidado , en éstas está todo ; de manera que tu aprovechamiento sea manifiesto a todos.
La viuda sea puesta en lista, no menor de sesenta años, la cual haya sido mujer de un varón.
Si algún fiel o alguna fiel tiene viudas, manténgalas, y no sea gravada la Iglesia; a fin de que haya lo suficiente para las que de verdad son viudas.
Todos los que están debajo del yugo de servidumbre, tengan a sus señores por dignos de toda honra, para que no sea blasfemado el Nombre del Señor y su doctrina.
el único que tiene inmortalidad, que habita en luz inaccesible; a quien ninguno de los hombres ha visto ni puede ver; al cual sea la honra y el imperio sempiterno. Amén.
la cual pretendiendo muchos, fueron descaminados acerca de la fe. La Gracia sea contigo. Amén.
para que el hombre de Dios sea perfecto, perfectamente equipado para toda buena obra.
En mi primera defensa ninguno me ayudó, antes me desampararon todos; no les sea imputado.
Y el Señor me librará de toda obra mala, y me salvará para su Reino celestial, al cual sea gloria por los siglos de los siglos. Amén.
El Señor Jesús, el Cristo, sea con tu espíritu. La Gracia sea con vosotros. Amén.
Porque es necesario que el obispo sea irreprensible, como dispensador de Dios; no soberbio, no iracundo, no dado al vino, no heridor, no codicioso de ganancias deshonestas;