'Pues' en la Biblia

Ahora pues, oh reyes, mostrad discernimiento; recibid amonestación, oh jueces de la tierra.

Honrad al Hijo para que no se enoje y perezcáis {en} el camino, pues puede inflamarse de repente su ira. ¿Cuán bienaventurados son todos los que en El se refugian!

Yo me acosté y me dormí; desperté, pues el SEÑOR me sostiene.

Sabed pues, que el SEÑOR hizo apartar al pío para sí; el SEÑOR oirá cuando yo a él clamare.

Ten piedad de mí, SEÑOR, pues languidezco; sáname, SEÑOR, porque mis huesos se estremecen.

Y te rodeará ayuntamiento de pueblos; por causa pues de él vuélvete en alto.

Consuma ahora mal a los malos, y establece al justo; pues el Dios justo es el que prueba los corazones y los riñones.

Pues le has hecho poco menor que los ángeles, Y coronástelo de gloria y de lustre.

Pues el necesitado no será olvidado para siempre, ni la esperanza de los afligidos perecerá eternamente.

Pues el SEÑOR es justo; El ama la justicia; los rectos contemplarán su rostro.

Allí tiemblan de espanto, pues Dios está con la generación justa.

Mictam de David.Protégeme, oh Dios, pues en ti me refugio.

pues tú no abandonarás mi alma en el Seol, ni permitirás a tu Santo ver corrupción.

Me libró de mi poderoso enemigo, y de los que me aborrecían, pues eran más fuertes que yo.

Pues todos sus juicios estuvieron delante de mí, Y no eché de mí sus estatutos.

Pagóme pues Jehová conforme á mi justicia; Conforme á la limpieza de mis manos delante de sus ojos.

Tú pues alumbrarás mi lámpara: Jehová mi Dios alumbrará mis tinieblas.

Pues contigo aplastaré ejércitos, y con mi Dios escalaré murallas.

Pues, ¿quién es Dios, fuera del SEÑOR? ¿Y quién es roca, sino sólo nuestro Dios,

Pues me ceñiste de fortaleza para la pelea; Has agobiado mis enemigos debajo de mí.

Pues le has salido al encuentro con bendiciones de bien: Corona de oro fino has puesto sobre su cabeza.

Pues le haces bienaventurado para siempre; con tu presencia le deleitas con alegría.

Pues tú los pondrás en fuga, Cuando aparejares en tus cuerdas las saetas contra sus rostros.

No estés lejos de mí, porque la angustia está cerca, pues no hay quien ayude.

Pues mi vida se gasta en tristeza, y mis años en suspiros; mis fuerzas se agotan a causa de mi iniquidad, y se ha consumido mi cuerpo.

pues en El se regocija nuestro corazón, porque en su santo nombre hemos confiado.

Temed al SEÑOR, vosotros sus santos, pues nada les falta a aquellos que le temen.

Vau Pues de aquí a poco no estará el malo; y contemplarás sobre su lugar, y no aparecerá.

Fui pues como un hombre que no oye, y que en su boca no tiene reprensiones.

Pues dije: Que no se alegren de mí {los que,} cuando mi pie resbala, se engrandecen sobre mí.

Confieso, pues, mi iniquidad; afligido estoy a causa de mi pecado.

¿Por qué te abates, alma mía, y {por qué} te turbas dentro de mí? Espera en Dios, pues he de alabarle otra vez {por} la salvación de su presencia.

¿Por qué te abates, alma mía, y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios, pues he de alabarle otra vez. ¿{El es} la salvación de mi ser, y mi Dios!

Pues que tú eres el Dios de mi fortaleza, ¿por qué me has desechado? ¿Por qué andaré enlutado por la opresión del enemigo?

¿Por qué te abates, alma mía, y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios, pues he de alabarle otra vez. ¿{El es} la salvación de mi ser, y mi Dios!

Pues no por su espada tomaron posesión de la tierra, ni su brazo los salvó, sino tu diestra y tu brazo, y la luz de tu presencia, porque te complaciste en ellos.

Pues tú nos has guardado de nuestros enemigos, Y has avergonzado á los que nos aborrecían.

¿no se habría dado cuenta Dios de esto? Pues El conoce los secretos del corazón.

Pues, he aquí, los reyes se reunieron; pasaron juntos.

Pues se ve que mueren todos los sabios; el loco y el ignorante perecen, y dejan a otros sus riquezas.

Pero Dios redimirá mi alma del poder del Seol, pues El me recibirá. (Selah)

Pues que tú aborreces el castigo, Y echas á tu espalda mis palabras?

a causa de la voz del enemigo, por la opresión del impío; pues echan iniquidad sobre mí, y con furia me persiguen.

El ha redimido en paz mi alma de la guerra contra mí; Pues fueron contra mí muchos.

Pues tú has librado mi alma de la muerte, y mis pies de tropiezo, para que yo pueda andar delante de Dios en la luz de la vida.

No, {pues} en {el} corazón cometéis iniquidad; la violencia de vuestras manos repartís en la tierra.

He aquí, se jactan con su boca; espadas hay en sus labios, pues {dicen:} ¿Quién oye?

Vuelvan pues a la tarde, y ladren como perros, y rodeen la ciudad.

Danos ayuda contra el adversario, pues vano es el auxilio del hombre.

Alma mía, espera en silencio solamente en Dios, pues de El {viene} mi esperanza.

y tuya es, oh Señor, la misericordia, pues tú pagas al hombre conforme a sus obras.

Traman injusticias, {diciendo:} Estamos listos con una trama bien concebida; pues los pensamientos del hombre y {su} corazón son profundos.

Hanse aumentado más que los cabellos de mi cabeza los que me aborrecen sin causa; Hanse fortalecido mis enemigos, los que me destruyen sin por qué: He venido pues á pagar lo que no he tomado.

Pues por amor de ti he sufrido vituperio; la ignominia ha cubierto mi rostro.

Respóndeme, oh SEÑOR, pues buena es tu misericordia; vuélvete a mí, conforme a tu inmensa compasión,

diciendo: Dios lo ha desamparado; perseguidlo y apresadlo, pues no hay quien {lo} libre.

Que viva, pues, y se le dé del oro de Sabá, y que se ore por él continuamente; que todo el día se le bendiga.

Pues he sido azotado todo el día, Y empezaba mi castigo por las mañanas.

Pensaré pues para entender esto; es a mis ojos duro trabajo.

Para el director del coro; {según tonada de} No destruyas. Salmo de Asaf. Cántico.Te damos gracias, oh Dios, {te} damos gracias, pues cercano está tu nombre; {los hombres} declaran tus maravillas.

Pues el furor del hombre te alabará; con un residuo de furor te ceñirás.

Y dije: Enfermedad mía es esta; Traeré pues á la memoria los años de la diestra del Altísimo.

Pues sacó de la peña corrientes, E hizo descender aguas como ríos.

Pues tentaron á Dios en su corazón, Pidiendo comida á su gusto.

Y comieron, y se llenaron bien; les cumplió pues su deseo.

El, pues, hizo terminar sus días en vanidad, y sus años en terror súbito.

pues sus corazones no eran rectos con él, ni estuvieron firmes en su pacto.

Los trajo, pues, a su tierra santa, a esta tierra montañosa que su diestra había adquirido.

Pues le provocaron con sus lugares altos, y despertaron sus celos con sus imágenes talladas.

Pues han devorado a Jacob, y han asolado su morada.

Guarda mi alma, pues soy piadoso; tú eres mi Dios; salva a tu siervo que en ti confía.

Pues tú, Señor, eres bueno y perdonador, abundante en misericordia para con todos los que te invocan.

Pues del SEÑOR es nuestro escudo, y del Santo de Israel nuestro rey.

y sea la gracia del Señor nuestro Dios sobre nosotros. Confirma, pues, sobre nosotros la obra de nuestras manos; sí, la obra de nuestras manos confirma.

Pues que á sus ángeles mandará acerca de ti, Que te guarden en todos tus caminos.

Suyo también el mar, pues él lo hizo; y sus manos formaron la tierra seca.

delante del SEÑOR, pues viene a juzgar la tierra; El juzgará al mundo con justicia, y a los pueblos con equidad.

A causa de tu enojo y de tu ira; Pues me alzaste, y me has arrojado.

Tú te levantarás {y} tendrás compasión de Sion, porque es tiempo de apiadarse de ella, pues ha llegado la hora.

Pues El miró desde su excelso santuario; desde el cielo el SEÑOR se fijó en la tierra,

Reprendió, pues, al mar Rojo, y se secó; y los condujo por las profundidades, como por un desierto.

{Le} provocaron, pues, a ira con sus actos, y la plaga se desató entre ellos.

humilló pues, sus corazones con trabajos, tropezaron y no hubo quien {los} socorriera.

Pues El habló, y levantó un viento tempestuoso que encrespó las olas del mar.

Danos ayuda contra el adversario, pues vano es el auxilio del hombre.

Mas tú, oh DIOS, Señor, por amor de tu nombre hazme {bien;} líbrame, pues es buena tu misericordia;

AMO á Jehová, pues ha oído Mi voz y mis súplicas.

Pues tú has librado mi alma de la muerte, Mis ojos de lágrimas, Y mis pies de desbarrar.

Pues los que no hacen iniquidad, andan en sus caminos.

Pues tus testimonios son mis deleites, y mis consejeros.

Y tendré respuesta para el que me afrenta, pues confío en tu palabra.

Ésta es mi consuelo en mi aflicción; pues tu palabra me ha vivificado.

Enséñame buen juicio y conocimiento, pues creo en tus mandamientos.

Por tus ordenanzas permanecen hasta hoy, pues todas las cosas te sirven.

Tuyo soy, {Señor,} sálvame, pues tus preceptos he buscado.

Apartaos de mí, malignos; Pues yo guardaré los mandamientos de mi Dios.

Profieran mis labios alabanzas, pues tú me enseñas tus estatutos.

Pues el cetro de la impiedad no descansará sobre la tierra de los justos, para que los justos no extiendan sus manos para hacer el mal.

Por demás os es el madrugar a levantaros, el veniros tarde a reposar, el comer pan de dolores; pues que a su amado dará Dios el sueño.

Pues allí los que nos habían llevado cautivos nos pedían canciones, y los que nos atormentaban {nos pedían} alegría, {diciendo:} Cantadnos {alguno} de los cánticos de Sion.