'Mano' en la Biblia
Si diriges bien tu corazón Y extiendes a El tu mano,
Si en tu mano hay iniquidad {y} la alejas {de ti} Y no permites que la maldad more en tus tiendas,
¿Quién entre todos ellos no sabe Que la mano del SEÑOR ha hecho esto,
Que en Su mano está la vida de todo ser viviente, Y el aliento de todo ser humano?
Que retires de mí Tu mano, Y que no me espante Tu terror.
Porque él ha extendido su mano contra Dios, Y se porta con soberbia contra el Todopoderoso (Shaddai).
Tengan piedad, tengan piedad de mí, ustedes mis amigos, Porque la mano de Dios me ha herido.
En la plenitud de su abundancia estará en estrechez; La mano de todo el que sufre vendrá {contra} él.
Mírenme, y quédense atónitos, Y pongan la mano sobre {su} boca.
No está en mano de ellos su prosperidad; El consejo de los impíos lejos está de mí.
``Aun hoy mi queja es rebelión; Su mano es pesada a pesar de mi gemido.
Con Su soplo se limpian los cielos; Su mano ha traspasado la serpiente huidiza.
Pone {el hombre} su mano en el pedernal; Vuelca de raíz los montes.
Los príncipes dejaban de hablar Y ponían la mano sobre su boca;
Conmigo {siempre} es nueva mi gloria, Y mi arco en mi mano se renueva.'
Te has vuelto cruel conmigo, Con el poder de Tu mano me persigues.
Sin embargo ¿no extiende la mano {el que está} en un montón de ruinas, Cuando clama en su calamidad?
Si he alzado contra el huérfano mi mano, Porque vi que yo tenía apoyo en la puerta (de la ciudad),
Si me he alegrado porque mi riqueza era grande, Y porque mi mano había adquirido mucho;
Y fue mi corazón seducido en secreto, Y mi mano tiró un beso de mi boca,
Si eres justo, ¿qué Le das, O qué recibe El de tu mano?
El sella la mano de todo hombre, Para que todos conozcan Su obra.
Para que ella eche mano a los confines de la tierra, Y de ella sean sacudidos los impíos?
``Yo soy insignificante; ¿qué puedo yo responderte? Mi mano pongo sobre la boca.
Entonces Yo también te confesaré Que tu mano derecha te puede salvar.
Pon tu mano sobre él; Te acordarás de la batalla {y} no lo volverás a hacer.
Levántate, oh SEÑOR; alza, oh Dios, Tu mano. No Te olvides de los pobres.
Tú {lo} has visto, porque has contemplado la malicia y el maltrato, para hacer justicia con Tu mano. A Ti se acoge el desvalido; Tú has sido amparo del huérfano.
Líbrame de los hombres, con Tu mano, oh SEÑOR, De los hombres del mundo, cuya herencia está en {esta} vida, Y cuyo vientre llenas de Tu tesoro. Se llenan de hijos, Y dejan lo que les abunda a sus pequeños.
Para el director del coro. {Salmo} de David, siervo del SEÑOR, el cual dirigió al SEÑOR las palabras de este cántico el día que el SEÑOR lo libró de la mano de todos sus enemigos, y de la mano de Saúl. Y dijo:``Yo Te amo, SEÑOR, fortaleza mía."
Extendió {la mano} desde lo alto y me tomó; Me sacó de las muchas aguas.
Hallará Tu mano a todos Tus enemigos; Tu diestra hallará a aquéllos que Te odian.
En Tu mano encomiendo mi espíritu; Tú me has redimido, oh SEÑOR, Dios de verdad.
En Tu mano están mis años; Líbrame de la mano de mis enemigos, y de los que me persiguen.
Porque día y noche Tu mano pesaba sobre mí; Mi vitalidad se desvanecía con el calor del verano. (Selah)
Echa mano del broquel y del escudo, Y levántate en mi ayuda.
Que no me alcance el pie del orgullo, Ni me mueva la mano de los impíos.
Cuando caiga, no quedará derribado, Porque el SEÑOR sostiene su mano.
Porque Tus flechas se han clavado en mí, Y sobre mí ha descendido Tu mano.
Quita de mí Tu plaga; Por la dureza de Tu mano estoy pereciendo.
Tú con Tu mano echaste fuera las naciones, Pero a ellos los plantaste. Afligiste a los pueblos, Pero a ellos los hiciste crecer.
Dios mío, rescátame de la mano del impío, De la mano del malhechor y del implacable,
Sin embargo, yo siempre estoy contigo; Tú me has tomado de la mano derecha.
¿Por qué retiras Tu mano, Tu diestra? ¡{Sácala} de dentro de Tu seno, destrúye{los}!
Porque hay una copa en la mano del SEÑOR, y el vino se fermenta, Lleno de mixtura, y de éste El sirve; Ciertamente lo sorberán hasta el fondo {y} lo beberán todos los impíos de la tierra.
En el día de mi angustia busqué al Señor; En la noche mi mano se extendía sin cansarse; Mi alma rehusaba ser consolada.
Como rebaño guiaste a Tu pueblo Por mano de Moisés y de Aarón.
Sea Tu mano sobre el hombre de Tu diestra, Sobre el hijo de hombre que para Ti fortaleciste.
En un momento Yo subyugaría a sus enemigos Y volvería Mi mano contra sus adversarios.
Rescaten al débil y al necesitado; Libren{los} de la mano de los impíos.
Abandonado entre los muertos; Como los caídos a espada que yacen en el sepulcro, De quienes ya no Te acuerdas, Y que han sido arrancados de Tu mano.
Tú tienes un brazo fuerte; Tu mano es poderosa, Tu diestra es exaltada.
Y con él estará siempre Mi mano; Mi brazo también lo fortalecerá.
Pondré también su mano sobre el mar Y su diestra sobre los ríos.
En cuya mano están las profundidades de la tierra; Suyas son también las cumbres de los montes.
Porque El es nuestro Dios, Y nosotros el pueblo de Su prado y las ovejas de Su mano. Si ustedes oyen hoy Su voz,
Los que aman al SEÑOR, aborrezcan el mal; El guarda las almas de Sus santos; Los libra de la mano de los impíos.
Tú les das, ellos recogen; Abres Tu mano, se sacian de bienes.
Los salvó de mano del que {los} odiaba, Y los redimió de mano del enemigo.
Los entregó en mano de las naciones, Y los que los aborrecían se enseñorearon sobre ellos.
Dígan{lo} los redimidos del SEÑOR, A quienes ha redimido de la mano del adversario,
Y que sepan que ésta es Tu mano, {Que} Tú, SEÑOR, lo has hecho.
Que esté pronta Tu mano a socorrerme, Porque Tus preceptos he escogido.
El SEÑOR es tu guardador; El SEÑOR es tu sombra a tu mano derecha.
Como los ojos de los siervos {miran} a la mano de su señor, Como los ojos de la sierva a la mano de su señora, Así nuestros ojos {miran} al SEÑOR nuestro Dios Hasta que se apiade de nosotros.
Como flechas en la mano del guerrero, Así son los hijos {tenidos} en la juventud.
Con la cual el segador no llena su mano, Ni el recogedor de gavillas sus brazos.
Con mano fuerte y brazo extendido, Porque para siempre es Su misericordia.
Aunque yo ande en medio de la angustia, Tú me vivificarás; Extenderás Tu mano contra la ira de mis enemigos, Y Tu diestra me salvará.
Por detrás y por delante me has cercado, Y Tu mano pusiste sobre mí.
Aun allí me guiará Tu mano, Y me tomará Tu diestra.
Extiende Tu mano desde lo alto; Rescátame y líbrame de las muchas aguas; De la mano de extranjeros,
Rescátame y líbrame de la mano de extranjeros, Cuya boca habla falsedad Y cuya diestra es diestra de mentira.
Abres Tu mano, Y sacias el deseo de todo ser viviente.
{Sean} las alabanzas de Dios en su boca, Y una espada de dos filos en su mano,
Porque he llamado y han rehusado {oír}, He extendido mi mano y nadie ha hecho caso.
Larga vida hay en su mano derecha, En su mano izquierda, riquezas y honra.
Es árbol de vida para los que echan mano de ella, Y felices son los que la abrazan.
No niegues el bien a quien se le debe, Cuando esté en tu mano el hacer{lo.}
Haz esto ahora, hijo mío, y líbrate, Ya que has caído en la mano de tu prójimo: Ve, humíllate e importuna a tu prójimo.
Líbrate como la gacela de la mano {del cazador} Y como ave de la mano del que caza.
Se ha llevado en la mano la bolsa del dinero, Volverá a casa para la luna llena."
Pobre es el que trabaja con mano negligente, Pero la mano de los diligentes enriquece.
La mano de los diligentes gobernará, Pero la indolencia será sujeta a trabajos forzados.
¿De qué sirve el precio en la mano del necio para comprar sabiduría Cuando no tiene entendimiento?
El perezoso mete su mano en el plato, {Y} ni aun a su boca la llevará.
{Como} canales de agua es el corazón del rey en la mano del SEÑOR; El lo dirige donde le place.
Se corta los pies {y} bebe violencia El que envía recado por mano de un necio.
{Como} espina {que} se clava en la mano de un borracho, Así es el proverbio en boca de los necios.
El perezoso mete la mano en el plato, {Pero} se fatiga de llevársela a la boca.
El que trata de contenerla, {es como} refrenar al viento Y recoger aceite con su mano derecha.
Si has sido necio en ensalzarte, O si has tramado {el mal, pon} la mano sobre tu boca;
Extiende su mano al pobre, Y alarga sus manos al necesitado.
Consideré en mi corazón estimular mi cuerpo con el vino, mientras mi corazón {me} guiaba con sabiduría, y echar mano de la insensatez, hasta que pudiera ver qué hay de bueno bajo el cielo que los hijos de los hombres hacen en los contados días de su vida.
No hay nada mejor para el hombre que comer y beber y decirse que su trabajo es bueno. Yo he visto que también esto es de la mano de Dios.
Entonces yo me volví y observé todas las opresiones que se cometen bajo el sol: Y {vi} las lágrimas de los oprimidos, Y no tenían quien {los} consolara; En mano de sus opresores estaba el poder, Y no tenían quien {los} consolara.
Más vale una mano llena de descanso Que dos puños llenos de trabajo y correr tras el viento.
Como salió del vientre de su madre, desnudo, Así volverá, yéndose tal como vino. Nada saca del fruto de su trabajo Que pueda llevarse en la mano.
Bueno es que retengas esto Sin soltar aquello de tu mano; Porque el que teme a Dios se sale con todo ello.