'Está' en la Biblia
antes en la ley de Jehová está su delicia, y en su ley medita de día y de noche.
Está atento a la voz de mi clamor, Rey mío y Dios mío, porque a ti oraré.
Mi alma también está muy turbada; y tú, Jehová, ¿hasta cuándo?
Mi defensa está en Dios, que salva a los rectos de corazón.
Dios es el que juzga al justo; y Dios está airado todos los días contra el impío.
Su boca está llena de maldición, de engaño y de fraude; debajo de su lengua hay vejación y maldad.
Jehová está en su santo templo: El trono de Jehová está en el cielo: Sus ojos ven, sus párpados examinan a los hijos de los hombres.
Sobre los malos lloverá lazos; fuego, azufre y terrible tempestad; ésta será la porción del cáliz de ellos.
Tú, Jehová, las guardarás; las preservarás de esta generación para siempre.
Allí temblaron de espanto; porque Dios está con la generación de los justos.
sino a los santos que están en la tierra, y a los íntegros, en quienes está toda mi complacencia.
A Jehová he puesto siempre delante de mí; porque está a mi diestra no seré conmovido.
«Oración de David» Oye, oh Jehová, justicia; está atento a mi clamor; escucha mi oración hecha de labios sin engaño.
De los hombres con tu mano, oh Jehová, de los hombres del mundo, que tienen su porción en esta vida, y cuyo vientre llenas de tu tesoro; sacian a sus hijos, y dejan el resto a sus pequeños.
No te alejes de mí, porque la angustia está cerca; porque no hay quien ayude.
Aderezas mesa delante de mí, en presencia de mis angustiadores; unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando.
Porque tu misericordia está delante de mis ojos, y camino en tu verdad.
En cuyas manos está el mal, y su diestra está llena de sobornos.
Una cosa he demandado de Jehová, ésta buscaré: Que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo.
No me arrebates a una con los malos, y con los obradores de iniquidad; los cuales hablan paz con su prójimo, pero la maldad está en su corazón.
Porque un momento durará su furor; mas en su voluntad está la vida: Por la noche durará el lloro, pero a la mañana vendrá la alegría.
Él ama justicia y juicio: De la misericordia de Jehová está llena la tierra.
Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; y salvará a los contritos de espíritu.
Iniquidad piensa sobre su cama; está en camino no bueno, el mal no aborrece.
Porque contigo está el manantial de la vida: En tu luz veremos la luz.
La ley de su Dios está en su corazón; No vacilarán sus pasos.
Mi corazón está acongojado, me ha dejado mi vigor; y aun la misma luz de mis ojos se ha ido de mí.
Pero yo estoy a punto de claudicar, y mi dolor está delante de mí continuamente.
Y ahora, Señor, ¿qué esperaré? Mi esperanza está en ti.
Entonces dije: He aquí, vengo; en el rollo del libro está escrito de mí:
El hacer tu voluntad, Dios mío, me ha agradado; y tu ley está en medio de mi corazón.
Fueron mis lágrimas mi pan de día y de noche, mientras me dicen todos los días: ¿Dónde está tu Dios?
Dios mío, mi alma está abatida dentro de mí; me acordaré por tanto de ti desde la tierra del Jordán, y de los hermonitas, desde el monte de Mizar.
como con una espada en mis huesos? Mis enemigos me afrentan, diciéndome cada día: ¿Dónde está tu Dios?
Cada día mi vergüenza está delante de mí, y me cubre la confusión de mi rostro,
Porque nuestra alma está agobiada hasta el polvo; nuestro vientre está pegado con la tierra.
Hijas de reyes hay entre tus mujeres ilustres: La reina está a tu diestra, con oro de Ofir.
Dios está en medio de ella; no será conmovida: Dios la ayudará al clarear la mañana.
Jehová de los ejércitos está con nosotros; nuestro refugio es el Dios de Jacob. (Selah)
Jehová de los ejércitos está con nosotros; nuestro refugio es el Dios de Jacob. (Selah)
Dios reina sobre las naciones; Sentado está Dios sobre su santo trono.
Conforme a tu nombre, oh Dios, así es tu loor hasta los fines de la tierra; de justicia está llena tu diestra.
El hombre que está en honra y no entiende, semejante es a las bestias que perecen.
Porque yo reconozco mis rebeliones; y mi pecado está siempre delante de mí.
«Al Músico principal: en Neginot: Masquil de David, cuando vinieron los zifeos y dijeron a Saúl: ¿No está David escondido en nuestra tierra?» Oh Dios, sálvame por tu nombre, y con tu poder defiéndeme.
Está atento, y respóndeme; clamo en mi oración, y levanto el grito,
Mi corazón está dolorido dentro de mí, y terrores de muerte sobre mí han caído.
Mi vida está entre leones; estoy echado entre hijos de hombres encendidos; sus dientes son lanzas y saetas, y su lengua espada aguda.
Mi corazón está firme, oh Dios, mi corazón está firme; cantaré y trovaré salmos.
«Al Músico principal: A Jedutún: Salmo de David» En Dios solamente está acallada mi alma; de Él viene mi salvación.
Alma mía, espera solamente en Dios; porque en Él está mi esperanza.
En Dios está mi salvación y mi gloria; en Dios está la roca de mi fortaleza, y mi refugio.
Está mi alma apegada a ti; tu diestra me ha sostenido.
Visitas la tierra, y la riegas: En gran manera la enriqueces con el río de Dios, que está lleno de aguas; preparas el grano de ellos, cuando así la dispones.
Los carros de Dios son veinte mil, y más millares de ángeles. El Señor está entre ellos, como en el Sinaí, así en el santuario.
Atribuid fortaleza a Dios; sobre Israel es su magnificencia, y su poder está en los cielos.
Y aun hasta la vejez y las canas; oh Dios, no me desampares, hasta que muestre tu fortaleza a esta generación, y tu poder a todos los que han de venir.
Porque no hay dolores en su muerte; antes su fortaleza está entera.
«Al Músico principal: sobre No destruyas: Salmo de Asaf: Cántico» Te damos gracias, oh Dios, gracias te damos; porque cercano está tu nombre: Tus maravillas declaramos.
Arruinada está la tierra y sus moradores; yo sostengo sus columnas. (Selah)
Porque el cáliz está en la mano de Jehová, y el vino es tinto, lleno de mixtura; y Él derrama del mismo; los asientos del mismo tomarán y beberán todos los impíos de la tierra.
Y en Salem está su tabernáculo, y su habitación en Sión.
Y dije: Enfermedad mía es ésta; traeré, pues, a la memoria los años de la diestra del Altísimo.
Porque dirán las gentes: ¿Dónde está su Dios? Sea notoria en las gentes, delante de nuestros ojos, la venganza de la sangre de tus siervos que fue derramada.
Oh Dios de los ejércitos, vuelve ahora: Mira desde el cielo, y considera, y visita esta viña,
Está quemada a fuego, asolada: ¡Perezcan por la reprensión de tu rostro!
«Salmo de Asaf» Dios está en la reunión de los dioses; en medio de los dioses juzga.
Ciertamente cercana está su salvación a los que le temen; para que habite la gloria en nuestra tierra.
Escucha, oh Jehová, mi oración, y está atento a la voz de mis ruegos.
«A los hijos de Coré: Salmo: Canción» Su cimiento está en el monte santo.
Porque mi alma está harta de males, y mi vida cercana al sepulcro.
Cuarenta años estuve disgustado con esta generación, y dije: Pueblo es que divaga de corazón, y no han conocido mis caminos.
Regocíjese el campo, y todo lo que en él está: Entonces todos los árboles del bosque rebosarán de contento delante de Jehová:
Luz está sembrada para el justo, y alegría para los rectos de corazón.
Jehová reina, temblarán los pueblos: Él está sentado sobre los querubines, se conmoverá la tierra.
«Oración del afligido, cuando está angustiado, y delante de Jehová derrama su lamento» Oh Jehová, escucha mi oración, y llegue a ti mi clamor.
Mi corazón está herido, y secó como la hierba; por lo cual me olvido de comer mi pan.
Cuanto está lejos el oriente del occidente, hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones.
¡Cuán numerosas son tus obras, oh Jehová! Hiciste todas ellas con sabiduría; la tierra está llena de tus beneficios.
«Canción: Salmo de David» Mi corazón está dispuesto, oh Dios; cantaré y entonaré salmos, todavía en mi gloria.
Y amó la maldición, y le vino; y no quiso la bendición, y ésta se alejó de él.
Porque yo estoy afligido y necesitado; y mi corazón está herido dentro de mí.
No tendrá temor de malas noticias; su corazón está firme, confiado en Jehová.
Afianzado está su corazón, no temerá, hasta que vea en sus enemigos su deseo.
¿Por qué han de decir las gentes: ¿Dónde está ahora su Dios?
Nuestro Dios está en los cielos; todo lo que quiso ha hecho.
Jehová está de mi lado, no temeré; ¿qué me puede hacer el hombre?
Jehová está por mí entre los que me ayudan; por tanto, yo veré mi deseo en los que me aborrecen.
Quebrantada está mi alma de desear tus juicios en todo tiempo.
DALET. Mi alma está pegada al polvo; vivifícame según tu palabra.
Ésta es mi consuelo en mi aflicción; pues tu palabra me ha vivificado.
De tu misericordia, oh Jehová, está llena la tierra; enséñame tus estatutos.
LAMED. Para siempre, oh Jehová, está establecida tu palabra en el cielo.
De continuo está mi alma en mi mano; mas no me he olvidado de tu ley.
Lejos está de los impíos la salvación; porque no buscan tus estatutos.
SIN. Príncipes me han perseguido sin causa; mas mi corazón está asombrado de tu palabra.
Jerusalén, que se ha edificado como una ciudad que está bien unida entre sí.
Muy hastiada está nuestra alma del escarnio de los que están en holgura, y del menosprecio de los soberbios.