'Un' en la Biblia
- 1.Gé 1:6-Gé 38:3
- 2.Gé 38:4-Éx 28:37
- 3.Éx 28:39-Números 3:34
- 4.Números 3:39-Números 18:16
- 5.Números 19:9-Josué 8:29
- 6.Josué 8:30-1 Samuel 2:36
- 7.1 Samuel 3:2-2 Samuel 6:20
- 8.2 Samuel 8:2-1 Reyes 19:21
- 9.1 Reyes 20:13-1 Crónicas 21:26
- 10.1 Crónicas 22:9-Job 31:35
- 11.Job 33:23-Eclesiastés 9:3
- 12.Eclesiastés 9:14-Jeremías 13:1
- 13.Jeremías 18:7-Ezequiel 42:4
- 14.Ezequiel 42:20-Miqueas 4:7
- 15.Miqueas 6:6-Mateo 21:33
- 16.Mateo 22:2-Lucas 6:17
- 17.Lucas 6:48-Juan 5:2
- 18.Juan 5:4-Hechos 22:12
- 19.Hechos 22:25-1 Timoteo 5:8
- 20.1 Timoteo 5:9-Apocalipsis 19:20
- 21.Apocalipsis 20:1-Apocalipsis 22:1
Y cuando le ataron con correas, Pablo dijo al centurión que estaba presente: ¿Os es lícito azotar a un hombre romano sin ser condenado?
Y se levantó un gran vocerío; y levantándose los escribas de la parte de los fariseos, contendían diciendo: Ningún mal hallamos en este hombre; que si un espíritu le ha hablado, o un ángel, no peleemos contra Dios.
Y cinco días después el sumo sacerdote Ananías, descendió con algunos de los ancianos y un cierto orador llamado Tértulo, y comparecieron ante el gobernador contra Pablo.
Y como estuvieron allí muchos días, Festo declaró al rey la causa de Pablo, diciendo: Un hombre ha sido dejado preso por Félix,
sino que tenían contra él ciertas cuestiones acerca de su superstición, y de un cierto Jesús, ya muerto, el cual Pablo afirmaba estar vivo.
Porque me parece fuera de razón enviar un preso, y no informar de los cargos que haya en su contra.
Y cuando fue determinado que habíamos de navegar para Italia, entregaron a Pablo y a algunos otros presos a un centurión llamado Julio, de la compañía Augusta.
Y costeándola difícilmente, llegamos a un lugar que llaman Buenos Puertos, cerca del cual estaba la ciudad de Lasea.
Y porque el puerto era incómodo para invernar, la mayoría acordaron zarpar también de allí, por si pudiesen arribar a Fenice, que es un puerto de Creta que mira hacia el nordeste y sudeste, e invernar allí.
Pero no mucho después se levantó en su contra un viento tempestuoso, que se llama Euroclidón.
y echando la sonda, hallaron veinte brazas, y pasando un poco más adelante, volviendo a echar la sonda, hallaron quince brazas.
Por tanto, os ruego que comáis por vuestra salud; pues ni aun un cabello de la cabeza de ninguno de vosotros perecerá.
Mas dando en un lugar de dos mares, hicieron encallar la nave; y la proa, hincada, quedó inmóvil, y la popa se abría con la violencia de las olas.
Y los bárbaros nos mostraron no poca humanidad; pues encendiendo un fuego, nos recibieron a todos, a causa de la lluvia que caía, y del frío.
Y ellos estaban esperando cuándo se había de hinchar, o caer muerto de repente; mas habiendo esperado mucho, y viendo que ningún mal le venía, cambiaron de parecer y dijeron que era un dios.
De allí, costeando alrededor, llegamos a Regio; y después de un día, soplando el sur, vinimos al segundo día a Puteoli,
Y cuando llegamos a Roma, el centurión entregó los presos al prefecto de la guardia, mas a Pablo le fue permitido estar aparte, con un soldado que le guardase.
Y habiéndole señalado un día, vinieron a él muchos a la posada, a los cuales declaraba y testificaba el reino de Dios desde la mañana hasta la tarde, persuadiéndoles acerca de Jesús, tanto por la ley de Moisés como por los profetas.
Porque apenas morirá alguno por un justo; con todo pudiera ser que alguno osara morir por el bueno.
Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, y así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.
Así también fue el don, mas no como el pecado. Porque si por el pecado de uno muchos murieron, mucho más la gracia de Dios abundó para muchos, y el don de gracia por un hombre, Jesucristo.
Porque si por un pecado reinó la muerte, por uno; mucho más los que reciben la gracia abundante y el don de la justicia reinarán en vida por uno, Jesucristo.
Porque como por la desobediencia de un hombre muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno, muchos serán constituidos justos.
Porque la palabra de la promesa es ésta: A este tiempo vendré, y Sara tendrá un hijo.
¿O no tiene potestad el alfarero sobre el barro, para hacer de la misma masa un vaso para honra y otro para deshonra?
También Isaías clama tocante a Israel: Aunque el número de los hijos de Israel sea como la arena del mar, un remanente será salvo.
Pero acerca de Israel dice: Todo el día extendí mis manos a un pueblo rebelde y contradictor.
Así también aun en este tiempo ha quedado un remanente escogido según la elección de gracia.
Porque de la manera que en un cuerpo tenemos muchos miembros, mas no todos los miembros tienen la misma función;
así nosotros, siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos de los otros.
Uno hace diferencia entre un día y otro; otro juzga iguales todos los días. Cada uno esté plenamente seguro en su propia mente.
Mas el Dios de la paciencia y de la consolación os dé que entre vosotros seáis de un mismo sentir según Cristo Jesús;
Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que todos habléis una misma cosa, y que no haya entre vosotros divisiones, sino que seáis perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer.
No es buena vuestra jactancia. ¿No sabéis que un poco de levadura leuda toda la masa?
¿O no sabéis que el que se une con una ramera, es hecho un cuerpo con ella? Porque dice: Los dos serán una sola carne.
Pero el que se une al Señor, un espíritu es.
Y en cuanto a comer de aquello que es sacrificado a los ídolos, sabemos que el ídolo nada es en el mundo, y que no hay más que un solo Dios.
mas para nosotros sólo hay un Dios, el Padre, de quien son todas las cosas, y nosotros en Él; y un Señor, Jesucristo, por el cual son todas las cosas, y nosotros por Él.
Ni forniquemos, como algunos de ellos fornicaron, y cayeron en un día veintitrés mil.
Porque nosotros, siendo muchos somos un solo pan, y un solo cuerpo; pues todos participamos de aquel mismo pan.
Así que cuando vosotros os reunís en un lugar, esto no es comer la cena del Señor.
Porque así como el cuerpo es uno, y tiene muchos miembros, pero todos los miembros del cuerpo, siendo muchos, son un solo cuerpo, así también Cristo.
Porque por un solo Espíritu somos todos bautizados en un cuerpo, ya sean judíos o gentiles, ya sean siervos o libres; y todos hemos bebido de un mismo Espíritu.
Porque el cuerpo no es un solo miembro, sino muchos.
Que si todos fueran un solo miembro, ¿dónde estaría el cuerpo?
Mas ahora son muchos los miembros, pero un solo cuerpo.
Y si un miembro padece, todos los miembros se duelen con él; o si un miembro es honrado, todos los miembros con él se regocijan.
Procurad, pues, los dones mejores; mas yo os muestro un camino aun más excelente.
Y si la trompeta da un sonido incierto, ¿quién se preparará para la batalla?
De otra manera, si bendices sólo con el espíritu, el que ocupa el lugar de un simple oyente, ¿cómo dirá amén a tu acción de gracias? pues no sabe lo que has dicho.
De manera que, si toda la iglesia se reúne en un lugar, y todos hablan en lenguas, y entran indoctos o incrédulos, ¿no dirán que estáis locos?
Y al último de todos, como por un nacido a destiempo, Él fue visto también por mí.
Y por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre la resurrección de los muertos.
Y así está escrito: El primer hombre Adán fue hecho un alma viviente; el postrer Adán, un espíritu vivificante.
He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos, pero todos seremos transformados.
En un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados.
y no como Moisés, que ponía un velo sobre su rostro, para que los hijos de Israel no pusiesen los ojos en el fin de aquello que había de ser abolido.
Por tanto, nosotros todos, mirando con cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados en la misma imagen, de gloria en gloria, como por el Espíritu del Señor.
Porque nuestra leve aflicción, la cual es momentánea, produce en nosotros un inmensurable y eterno peso de gloria;
Porque sabemos que si nuestra casa terrenal, este tabernáculo, se deshiciere, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha de manos, eterna, en el cielo.
Porque aunque os contristé con la carta, no me arrepiento, bien que me arrepentí; porque veo que aquella carta, aunque por un poco de tiempo, os contristó.
¡Quiera Dios que toleraseis un poco mi locura! En verdad, toleradme.
Porque os celo con celo de Dios; porque os he desposado a un esposo, para presentaros como una virgen pura a Cristo.
Otra vez digo: Que nadie me tenga por loco; de otra manera, recibidme aun como a loco, para que me gloríe yo un poquito.
Tres veces fui azotado con varas; una vez apedreado; tres veces padecí naufragio; una noche y un día estuve en las profundidades;
y fui descolgado del muro en un canasto por una ventana, y escapé de sus manos.
Conozco a un hombre en Cristo, que hace catorce años (si en el cuerpo, no lo sé; si fuera del cuerpo, no lo sé: Dios lo sabe) fue arrebatado hasta el tercer cielo.
Y para que no me enaltezca desmedidamente por la grandeza de las revelaciones, me es dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca sobremanera.
Me he hecho un necio al gloriarme; vosotros me obligasteis; pues yo debía de ser alabado por vosotros; porque en nada soy menos que aquellos grandes apóstoles, aunque nada soy.
Rogué a Tito, y envié con él un hermano. ¿Os engañó quizá Tito? ¿No hemos procedido con el mismo espíritu, y en las mismas pisadas?
Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo os predicare otro evangelio del que os hemos predicado, sea anatema.
a los cuales ni aun por un instante accedimos a someternos, para que la verdad del evangelio permaneciese con vosotros.
Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque escrito está: Maldito todo aquel que es colgado en un madero),
Hermanos, hablo como hombre: Un pacto, aunque sea de hombre, si fuere confirmado, nadie lo anula, o le añade.
¿Para qué entonces, sirve la ley? Fue añadida por causa de las transgresiones, hasta que viniese la simiente a quien fue hecha la promesa, y fue ordenada por ángeles en mano de un mediador.
Ahora bien, un mediador no es de uno solo, pero Dios es uno.
y no desechasteis ni menospreciasteis mi prueba que estaba en mi carne, antes me recibisteis como a un ángel de Dios, como a Cristo Jesús.
Un poco de levadura leuda toda la masa.
aboliendo en su carne las enemistades, la ley de los mandamientos contenidos en ordenanzas, para hacer en sí mismo de los dos un nuevo hombre, haciendo así la paz;
y reconciliar con Dios a ambos en un cuerpo mediante la cruz, matando en sí mismo las enemistades.
porque por medio de Él ambos tenemos entrada por un mismo Espíritu al Padre.
en quien todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor;
Un cuerpo, y un Espíritu, como sois también llamados en una misma esperanza de vuestro llamamiento.
Un Señor, una fe, un bautismo,
un Dios y Padre de todos, el cual es sobre todo, y por todo, y en todos vosotros.
hasta que todos lleguemos en la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo;
Solamente que os comportéis como es digno del evangelio de Cristo; para que, ya sea que vaya a veros, o que esté ausente, oiga de vosotros que estáis firmes en un mismo espíritu, unánimes combatiendo juntos por la fe del evangelio;
Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre;
A Euodias ruego, y ruego a Sintique, que sean de un mismo sentir en el Señor.
como lo habéis aprendido de Epafras, nuestro amado consiervo, el cual por vosotros es un fiel ministro de Cristo,
Y la paz de Dios reine en vuestros corazones; a la que asimismo sois llamados en un cuerpo; y sed agradecidos.
Amos, tratad a vuestros siervos como es justo y recto, sabiendo que vosotros también tenéis un Amo en el cielo.
Mas nosotros, hermanos, separados de vosotros por un poco de tiempo, de vista, no de corazón, tanto más procuramos con mucho deseo ver vuestro rostro.
Pero nosotros, que somos del día, seamos sobrios, vestidos de la coraza de fe y amor, y de la esperanza de salvación, como un yelmo.
Y por causa de esto Dios les envía un poder engañoso, para que crean la mentira;
no porque no tuviésemos potestad, sino por daros en nosotros un ejemplo a seguir.
Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre;
No un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en condenación del diablo.
Porque los que ejercen bien el diaconado, adquieren para sí un grado honroso, y mucha confianza en la fe que es en Cristo Jesús.
Y si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor que un incrédulo.
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- 14.Ezequiel 42:20-Miqueas 4:7
- 15.Miqueas 6:6-Mateo 21:33
- 16.Mateo 22:2-Lucas 6:17
- 17.Lucas 6:48-Juan 5:2
- 18.Juan 5:4-Hechos 22:12
- 19.Hechos 22:25-1 Timoteo 5:8
- 20.1 Timoteo 5:9-Apocalipsis 19:20
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