15832 casos

'De' en la Biblia

Ofrecieron sacrificios a demonios, no a Dios, A dioses que no habían conocido, {Dioses} nuevos que vinieron recientemente, A los que los padres de ustedes no temieron.

Y el SEÑOR vio {esto,} y se llenó de ira A causa de la provocación de Sus hijos y de Sus hijas.

Entonces El dijo: `Escondede ellos Mi rostro, Veré cuál {será} su fin; Porque son una generación perversa, Hijos en los cuales no hay fidelidad.

Porque fuego se ha encendido en Mi ira, Que quema hasta las profundidades del Seol (región de los muertos), Consume la tierra con su fruto, E incendia los fundamentos de los montes.

{Serán} debilitados por el hambre, y consumidos por la plaga Y destrucción amarga; Dientes de fieras enviaré sobre ellos, Con veneno de {serpientes} que se arrastran en el polvo.

Afuera traerá duelo la espada, Y dentro el terror, Tanto al joven como a la virgen, Al niño de pecho como al hombre encanecido.

Yo hubiera dicho: ``Los haré pedazos, Borraré la memoria de ellos de entre los hombres,"

Porque la vid de ellos es de la vid de Sodoma Y de los campos de Gomorra; Sus uvas son uvas venenosas, Sus racimos, amargos.

Mía es la venganza y la retribución; A su tiempo el pie de ellos resbalará, Porque el día de su calamidad está cerca, Ya se apresura lo que les está preparado.'

``Porque el SEÑOR vindicará a Su pueblo Y tendrá compasión de Sus siervos, Cuando vea que {su} fuerza se ha ido, Y que nadie {queda,} ni siervo ni libre.

Que comían la grasa de sus sacrificios, {Y} bebían el vino de su libación? ¡Que se levanten y los ayuden! ¡Que sean ellos su refugio!

Cuando afile Mi espada flameante Y Mi mano empuñe la justicia, Me vengaré de Mis adversarios Y daré el pago a los que Me aborrecen.

Embriagaré Mis flechas con sangre, Y Mi espada se hartará de carne, De sangre de muertos y cautivos, De los jefes de larga cabellera del enemigo.'

Regocíjense, naciones, {con} Su pueblo, Porque El vengará la sangre de Sus siervos; Traerá venganza sobre Sus adversarios, Y hará expiación por Su tierra {y} Su pueblo."

Entonces llegó Moisés y habló todas las palabras de este cántico a oídos del pueblo, él, con Josué, hijo de Nun.

Cuando terminó Moisés de hablar todas estas palabras a todo Israel,

les dijo: ``Fijen en su corazón todas las palabras con que les advierto hoy: ordenarán a sus hijos que obedezcan cuidadosamente todas las palabras de esta ley.

"Porque no es palabra inútil para ustedes; ciertamente es su vida. Por esta palabra prolongarán sus días en la tierra adonde ustedes {van,} cruzando el Jordán a fin de poseerla."

``Sube a estos montes de Abarim, al Monte Nebo, que está en la tierra de Moab frente a Jericó, y mira hacia la tierra de Canaán, la cual doy en posesión a los Israelitas.

porque ustedes Me fueron infieles en medio de los Israelitas en las aguas de Meriba de Cades, en el desierto de Zin, porque no Me santificaron en medio de los Israelitas.

"Por tanto, sólo de lejos verás la tierra, pero no entrarás allí, a la tierra que doy a los Israelitas."

Esta es la bendición con la que Moisés, hombre de Dios, bendijo a los Israelitas antes de morir.

Dijo: ``El SEÑOR vino del Sinaí Esclareciéndoles desde Seir; Resplandeció desde el Monte Parán, Y vino de en medio de diez millares de santos; A Su diestra había fulgor centelleante para ellos.

En verdad, El ama al pueblo; Todos Tus santos están en Tu mano, Y siguen en Tus pasos; {Todos} reciben de Tus palabras.

El era rey en Jesurún (Israel), Cuando se reunieron los jefes del pueblo, Junto con las tribus de Israel.

En cuanto a Judá, esto dijo: ``Escucha, oh SEÑOR, la voz de Judá, Y tráelo a su pueblo. Con sus manos luchó por ellos; Sé Tú su ayuda contra sus adversarios."

De Leví dijo: ``Tu Tumim y Tu Urim {sean} para Tu hombre santo, A quien pusiste a prueba en Masah, Con quien luchaste en las aguas de Meriba;

El que dijo de su padre y de su madre: `No los conozco'; Y no reconoció a sus hermanos, Ni consideró a sus propios hijos, Porque obedecieron Tu palabra, Y guardaron Tu pacto.

Ellos enseñarán Tus ordenanzas a Jacob Y Tu ley a Israel. Pondrán incienso delante de Ti, Y holocaustos perfectos sobre Tu altar.

Bendice, oh SEÑOR, sus esfuerzos, Y acepta la obra de sus manos; Quebranta los lomos de los que se levantan contra él Y de los que lo odian, para que no se levanten {más."}

De Benjamín, dijo: ``Habite el amado del SEÑOR en seguridad junto a Aquél Que le protege todo el día, Y entre cuyos hombros mora."

De José, dijo: ``Bendita del SEÑOR {sea} su tierra, Con lo mejor de los cielos, con el rocío Y con las profundidades que están debajo;

Con lo mejor de los montes antiguos Y con lo escogido de los collados eternos;

Con lo mejor de la tierra y cuanto contiene Y el favor del que habitaba en la zarza. Descienda {la bendición} sobre la cabeza de José, Y sobre la coronilla del consagrado entre sus hermanos.

Su majestad es como la del primogénito del toro, Y sus cuernos son los cuernos del búfalo. Con ellos empujará a los pueblos, Todos juntos, {hasta} los confines de la tierra. Tales son los diez millares de Efraín, Y tales los millares de Manasés."

De Zabulón, dijo: ``Alégrate, Zabulón, en tus salidas Y tú Isacar, en tus tiendas.

Llamarán a los pueblos {al} monte; Allí ofrecerán sacrificios de justicia, Pues disfrutarán de la abundancia de los mares, Y de los tesoros escondidos en la arena."

De Gad, dijo: ``Bendito el que ensancha a Gad; Se echa como león, Y desgarra el brazo y también la coronilla.

Entonces reservó para sí la primera {parte}, Pues allí la porción de gobernante {le} estaba reservada. Y él vino {con} los jefes del pueblo; Ejecutó la justicia del SEÑOR, Y Sus ordenanzas con Israel."

De Dan, dijo: ``Dan es cachorro de león Que salta desde Basán."

De Neftalí, dijo: ``Neftalí, colmado de favores, Y lleno de la bendición del SEÑOR, Toma posesión del mar y del sur."

Y de Aser, dijo: ``Más bendito que hijos es Aser; Sea favorecido por sus hermanos, Y moje su pie en aceite.

Nadie hay como el Dios de Jesurún (Israel), Que cabalga los cielos {para venir} en tu ayuda, Y las nubes, en Su majestad.

Por eso Israel habita confiado, La fuente de Jacob {habita} separada En una tierra de grano y vino nuevo; Sus cielos también destilan rocío.

Dichoso tú, Israel. ¿Quién como tú, pueblo salvado por el SEÑOR? El es escudo de tu ayuda, Y espada de tu gloria. Tus enemigos simularán someterse ante ti, Y tú pisotearás sus lugares altos."

Y subió Moisés desde la llanura de Moab al Monte Nebo, a la cumbre del Pisga, que está frente a Jericó, y el SEÑOR le mostró toda la tierra: Galaad hasta Dan,

todo Neftalí, la tierra de Efraín y de Manasés, toda la tierra de Judá hasta el Mar Occidental (el Mediterráneo),

el Neguev (región del sur) y la llanura del Valle de Jericó, la ciudad de las palmeras, hasta Zoar.

Y El lo enterró en el valle, en la tierra de Moab, frente a Bet Peor; pero nadie sabe hasta hoy el lugar de su sepultura.

Los Israelitas lloraron a Moisés por treinta días en la llanura de Moab; así se cumplieron los días de llanto {y} duelo por Moisés.

Y Josué, hijo de Nun, estaba lleno del espíritu de sabiduría, porque Moisés había puesto sus manos sobre él; y los Israelitas le escucharon e hicieron tal como el SEÑOR había mandado a Moisés.

{nadie como él} por todas las señales y prodigios que el SEÑOR le mandó hacer en la tierra de Egipto, contra Faraón, contra todos sus siervos y contra toda su tierra,

y por la mano poderosa y por todos los hechos grandiosos y terribles que Moisés realizó ante los ojos de todo Israel.

Después de la muerte de Moisés, siervo del SEÑOR, el SEÑOR habló a Josué, hijo de Nun, y ayudante (ministro) de Moisés, y le dijo:

"Todo lugar que pise la planta de su pie les he dado a ustedes, tal como dije a Moisés.

"Desde el desierto y este Líbano hasta el gran río, el Río Eufrates, toda la tierra de los Hititas hasta el Mar Grande (el Mediterráneo) {que está} hacia la puesta del sol, será territorio de ustedes.

"Sé fuerte y valiente, porque tú darás a este pueblo posesión de la tierra que juré a sus padres que les daría.

"Solamente sé fuerte y muy valiente. Cuídate de cumplir toda la ley que Moisés mi siervo te mandó. No te desvíes de ella ni a la derecha ni a la izquierda, para que tengas éxito dondequiera que vayas.

``Pasen por medio del campamento y den órdenes al pueblo, diciéndoles: `Preparen provisiones para ustedes, porque dentro de tres días cruzarán el Jordán para entrar a poseer la tierra que el SEÑOR su Dios les da en posesión.'"

Y a los Rubenitas, a los Gaditas y a la media tribu de Manasés, Josué les dijo:

"Sus mujeres, sus pequeños y su ganado permanecerán en la tierra que Moisés les dio al otro lado del Jordán. Pero ustedes, todos los valientes guerreros, pasarán en orden de batalla delante de sus hermanos, y los ayudarán,

hasta que el SEÑOR dé reposo a sus hermanos como a ustedes, y ellos también posean la tierra que el SEÑOR su Dios les da. Entonces volverán a su tierra y poseerán lo que Moisés, siervo del SEÑOR, les dio al otro lado del Jordán hacia el oriente."

Entonces Josué, hijo de Nun, envió secretamente desde Sitim a dos espías diciéndoles: ``Vayan, reconozcan la tierra, especialmente Jericó." Fueron, pues, y entraron en la casa de una ramera que se llamaba Rahab, y allí se hospedaron.

Pero le dieron {este} aviso al rey de Jericó: ``Unos hombres de los Israelitas han venido aquí esta noche para reconocer toda la tierra."

Entonces el rey de Jericó mandó decir a Rahab: ``Saca a los hombres que han venido a ti, que han entrado en tu casa, porque han venido para reconocer toda la tierra."

Pero la mujer había tomado a los dos hombres y los había escondido, y respondió: ``Sí, los hombres vinieron a mí, pero yo no sabía de dónde eran.

"Los hombres salieron {a la hora de} cerrar la puerta, al oscurecer. No sé adónde fueron. Vayan de prisa tras ellos, que los alcanzarán."

Pero ella los había hecho subir al terrado, y los había escondido entre los tallos de lino que había puesto en orden en el terrado.

Los hombres los persiguieron por el camino al Jordán hasta los vados. Tan pronto como salieron los que los perseguían, fue cerrada la puerta {de la ciudad}.

y dijo a los hombres: ``Sé que el SEÑOR les ha dado esta tierra, y que el terror de ustedes ha caído sobre nosotros, y que todos los habitantes del país se han acobardado ante ustedes.

"Porque hemos oído cómo el SEÑOR secó el agua del Mar Rojo delante de ustedes cuando salieron de Egipto. También supimos lo que hicieron a los dos reyes de los Amorreos que estaban al otro lado del Jordán, a Sehón y a Og, a quienes destruyeron por completo.

"Cuando oímos {esto,} nos acobardamos, no quedando ya valor en hombre alguno por causa de ustedes. Porque el SEÑOR, el Dios de ustedes, es Dios arriba en los cielos y abajo en la tierra.

"Ahora pues, júrenme por el SEÑOR, ya que los he tratado con bondad, que ustedes tratarán con bondad a la casa de mi padre. Denme una promesa segura,

de que dejarán vivir a mi padre y a mi madre, a mis hermanos y a mis hermanas, con todos los suyos, y que librarán nuestras vidas de la muerte."

Y los hombres le dijeron: ``Nuestra vida responderá por la de ustedes, si no revelan nuestro propósito. Y sucederá que cuando el SEÑOR nos dé la tierra, te trataremos con bondad y lealtad (sinceridad)."

Entonces ella los hizo bajar con una cuerda por la ventana, porque su casa estaba en la muralla de la ciudad y ella vivía en la misma muralla.

Los hombres le dijeron: ``Nosotros {quedaremos} libres de este juramento que nos has hecho jurar,

a menos que, cuando entremos en la tierra, ates este cordón de hilo escarlata a la ventana por la cual nos dejas bajar, y reúnas contigo en la casa a tu padre y a tu madre, a tus hermanos y a toda la casa de tu padre.

"Cualquiera que salga de las puertas de tu casa a la calle, su sangre {caerá} sobre su propia cabeza, y {quedaremos} libres; pero la sangre de cualquiera que esté en la casa contigo {caerá} sobre nuestra cabeza si alguien pone su mano sobre él.

Entonces los dos hombres regresaron y bajaron de la región montañosa, y pasaron y vinieron a Josué, hijo de Nun, y le contaron todo lo que les había acontecido.

Y dijeron a Josué: ``Ciertamente, el SEÑOR ha entregado toda la tierra en nuestras manos, y además, todos los habitantes de la tierra se han acobardado ante nosotros."

Josué se levantó muy de mañana; y él y todos los Israelitas salieron de Sitim y llegaron al Jordán. Allí acamparon antes de cruzar.

Después de tres días los oficiales pasaron por medio del campamento

y dieron órdenes al pueblo: ``Cuando ustedes vean el arca del pacto del SEÑOR su Dios y a los sacerdotes Levitas llevándola, entonces saldrán de su lugar y la seguirán.

"Sin embargo, dejarán entre ustedes y ella una distancia de unos 900 metros (2,000 codos). No se acerquen a ella para saber el camino por donde deben ir, porque no han pasado antes por este camino."

El SEÑOR dijo a Josué: ``Hoy comenzaré a exaltarte a los ojos de todo Israel, para que sepan que tal como estuve con Moisés, estaré contigo.

"Además, darás órdenes a los sacerdotes que llevan el arca del pacto, diciéndoles: `Cuando lleguen a la orilla de las aguas del Jordán, se detendrán en el Jordán.'"

Josué añadió: ``En esto conocerán que el Dios vivo está entre ustedes, y que ciertamente expulsará de delante de ustedes a los Cananeos, a los Hititas, a los Heveos, a los Ferezeos, a los Gergeseos, a los Amorreos y a los Jebuseos.

"Miren, el arca del pacto del Señor de toda la tierra va a pasar el Jordán delante de ustedes.

Las citas bíblicas son tomadas Nueva Biblia de los Hispanos © 2005 by The Lockman Foundation, La Habra, Calif, http://www.lockman.org. Usadas con permiso