14283 casos

'Que' en la Biblia

Y él le dijo: ``Te ruego que me des a beber un poco de agua, porque tengo sed." Y ella abrió un odre de leche y le dio de beber; entonces lo cubrió.

Y cuando Barac venía persiguiendo a Sísara, Jael salió a su encuentro, y le dijo: ``Ven, y te mostraré al hombre que buscas." Y él entró con ella, y vio que Sísara estaba tendido, muerto con la estaca en la sien.

Y la mano de los Israelitas se hizo más y más dura sobre Jabín, rey de Canaán, hasta que lo destruyeron.

Se habían terminado los campesinos, se habían terminado en Israel, Hasta que yo, Débora, me levanté, Hasta que me levanté, {como} madre en Israel.

Ustedes que cabalgan en asnas blancas, Que se sientan en {ricos} tapices, Que viajan por el camino, canten.

Al sonido de los que dividen las {manadas} entre los abrevaderos, Allí repetirán los actos de justicia del SEÑOR, Los actos de justicia para con Sus campesinos en Israel. Entonces el pueblo del SEÑOR descendió a las puertas.

De Efraín {descendieron} los arraigados en Amalec, En pos de ti, Benjamín, con tus pueblos. De Maquir descendieron jefes, Y de Zabulón los que manejan vara de mando.

¿Por qué te sentaste entre los rediles, Escuchando los toques de flauta para los rebaños? Entre las divisiones de Rubén {Había} grandes indecisiones de corazón.

Galaad se quedó al otro lado del Jordán. ¿Y por qué se quedó Dan en {las} naves? Aser se sentó a la orilla del mar, Y se quedó junto a sus puertos.

Zabulón {era} pueblo que despreció su vida {hasta} la muerte. Y también Neftalí, en las alturas del campo.

Miraba por la ventana y se lamentaba La madre de Sísara, por entre la celosía: ` ¿Por qué se tarda en venir su carro? ¿Por qué se retrasa el trotar de sus carros?'

Así perezcan todos Tus enemigos, oh SEÑOR. Pero sean los que Te aman como la salida del sol en toda su fuerza." Y el país tuvo descanso por cuarenta años.

Porque sucedía que cuando {los hijos de} Israel sembraban, los Madianitas venían con los Amalecitas y los hijos del oriente y subían contra ellos.

el SEÑOR envió un profeta a los Israelitas que les dijo: ``Así dice el SEÑOR, Dios de Israel: `Fui Yo el que los hice subir a ustedes de Egipto, y los saqué de la casa de servidumbre (de esclavos).

Entonces vino el ángel del SEÑOR y se sentó debajo de la encina que {estaba} en Ofra, la cual pertenecía a Joás de Abiezer. Y su hijo Gedeón estaba sacudiendo el trigo en el lagar, para esconderlo de los Madianitas.

Entonces Gedeón le respondió: ``Ah señor mío, si el SEÑOR está con nosotros, ¿por qué nos ha ocurrido todo esto? ¿Y dónde están todas Sus maravillas que nuestros padres nos han contado, diciendo: ` ¿No nos hizo el SEÑOR subir de Egipto?' Pero ahora el SEÑOR nos ha abandonado, y nos ha entregado en mano de los Madianitas."

"Te ruego que no Te vayas de aquí hasta que yo vuelva a Ti, y traiga mi ofrenda y la ponga delante de Ti." ``Me quedaré hasta que vuelvas," le respondió el SEÑOR.

Entonces el ángel del SEÑOR extendió la punta de la vara que estaba en su mano y tocó la carne y el pan sin levadura. Y subió fuego de la roca que consumió la carne y el pan sin levadura. Y el ángel del SEÑOR desapareció de su vista.

Al ver Gedeón que era el ángel del SEÑOR, dijo: `` ¡Ay de mí, Señor DIOS! Porque ahora he visto al ángel del SEÑOR cara a cara."

Aquella misma noche el SEÑOR le dijo: ``Toma el novillo de tu padre y otro novillo de siete años. Derriba el altar de Baal que pertenece a tu padre y corta la Asera (deidad femenina) que está junto a él.

"Edifica después, en debida forma, un altar al SEÑOR tu Dios sobre la cumbre de este peñasco. Toma el segundo novillo y ofrece holocausto con la leña de la Asera que has cortado."

Cuando los hombres de la ciudad se levantaron temprano en la mañana, vieron que el altar de Baal había sido derribado y cortada la Asera que estaba junto a él, y que el segundo novillo había sido ofrecido en el altar que se había edificado.

Entonces los hombres de la ciudad dijeron a Joás: ``Saca a tu hijo para que muera, porque ha derribado el altar de Baal, y también ha cortado la Asera que estaba a su lado."

Pero Joás dijo a todos los que estaban contra él: `` ¿Lucharán ustedes por Baal, o lo librarán? A cualquiera que luche por él, se le dará muerte antes de llegar la mañana. Si es un dios, que luche por sí mismo, porque alguien ha derribado su altar."

Por tanto, aquel día Gedeón fue llamado Jerobaal, es decir, que Baal luche contra él, porque había derribado su altar.

Envió mensajeros por todo Manasés, que también se juntó para seguirlo. Y envió mensajeros a Aser, a Zabulón y a Neftalí, que subieron a su encuentro.

voy a poner un vellón de lana en la era. Si hay rocío solamente en el vellón y toda la tierra queda seca, entonces sabré que librarás a Israel por mi mano, como has dicho."

Y Gedeón dijo a Dios: ``No se encienda Tu ira contra mí si hablo otra vez. Te ruego que me permitas hacer otra vez una prueba con el vellón. Que ahora quede seco el vellón y haya rocío en toda la tierra."

Jerobaal, es decir Gedeón, se levanto temprano y todo el pueblo que {estaba} con él, y acamparon junto a la fuente de Harod. El campamento de Madián estaba al norte de ellos, {cerca} de la colina de More, en el valle.

Y el SEÑOR dijo a Gedeón: ``El pueblo que está contigo es demasiado numeroso para que Yo entregue a Madián en sus manos; no sea que Israel se vuelva orgulloso, y diga: `Mi propia fortaleza me ha librado.'

"Ahora pues, proclama a oídos del pueblo: `Cualquiera que tenga miedo y tiemble, que regrese y se vaya del Monte Galaad.'" Y 22,000 personas regresaron, pero quedaron 10,000.

Entonces el SEÑOR dijo a Gedeón: ``Todavía el pueblo es demasiado numeroso. Hazlos bajar al agua y allí te los probaré. Y será que de quien Yo te diga: `Este irá contigo,' ése irá contigo. Pero todo aquél de quien Yo te diga: `Este no irá contigo,' ése no irá."

E hizo bajar el pueblo al agua. Y el SEÑOR dijo a Gedeón: ``Pondrás a un lado a todo aquél que lame el agua con su lengua, como lame el perro, y a todo el que se arrodilla para beber."

Y fue el número de los que lamieron, poniendo la mano a su boca, 300 hombres. Pero todo el resto del pueblo se arrodilló para beber.

El SEÑOR dijo entonces a Gedeón: ``Los salvaré con los 300 hombres que lamieron el agua y entregaré a los Madianitas en tus manos. Que todos los {demás} del pueblo se vayan, cada uno a su casa."

y oirás lo que dicen. Entonces tus manos serán fortalecidas para descender contra el campamento." Y descendió con su criado Fura hasta los puestos avanzados del ejército que {estaban} en el campamento.

Cuando Gedeón llegó {allí,} un hombre estaba contando un sueño a su amigo: ``Escuchen, tuve un sueño. Un pan de cebada iba rodando hasta el campamento de Madián, y llegó hasta la tienda y la golpeó de manera que cayó, y la volcó de arriba abajo y la tienda quedó extendida."

Su amigo le respondió: ``Esto no es otra cosa que la espada de Gedeón, hijo de Joás, varón de Israel. Dios ha entregado en su mano a Madián y a todo el campamento."

``Mírenme," les dijo, ``y hagan lo mismo que yo. Y cuando yo llegue a las afueras del campamento, como yo haga, así harán ustedes.

"Cuando yo y todos los que estén conmigo toquemos la trompeta, entonces también ustedes tocarán las trompetas alrededor de todo el campamento, y digan: `Por el SEÑOR y por Gedeón.'"

Gedeón llegó con los 100 hombres que estaban con él a las afueras del campamento, al principio de la guardia de medianoche, cuando apenas habían apostado la guardia. Entonces tocaron las trompetas y rompieron los cántaros que tenían en las manos.

Gedeón envió mensajeros por toda la región montañosa de Efraín y dijo: ``Desciendan contra Madián y tomen los vados antes que ellos, hasta Bet Bara y el Jordán." Y todos los hombres de Efraín se reunieron y tomaron los vados hasta Bet Bara y el Jordán.

Entonces los hombres de Efraín le dijeron: `` ¿Qué es esto que nos has hecho, al no llamarnos cuando fuiste a pelear contra Madián?" Y lo criticaron duramente.

Pero él les dijo: `` ¿Qué he hecho yo ahora en comparación con ustedes? ¿No es mejor el rebusco de Efraín que la vendimia de Abiezer?

"Dios ha entregado en manos de ustedes a los jefes de Madián, Oreb y Zeeb; ¿y qué pude hacer yo en comparación con ustedes?" Entonces se aplacó la ira de ellos contra él cuando dijo esto.

Gedeón y los 300 hombres que {iban} con él llegaron al Jordán {y} lo cruzaron, cansados, pero continuando la persecución.

Entonces Gedeón dijo a los hombres de Sucot: ``Les ruego que den pan a la gente que me sigue, porque están cansados, y estoy persiguiendo a Zeba y a Zalmuna, reyes de Madián."

Pero los jefes de Sucot dijeron: `` ¿Están ya las manos de Zeba y Zalmuna en tu poder para que demos pan a tu ejército?"

Ahora bien, Zeba y Zalmuna estaban en Carcor, y sus ejércitos con ellos, unos 15,000 hombres, los que habían quedado de todo el ejército de los hijos del oriente. Porque los que habían caído eran 120,000 hombres que sacaban espada.

Gedeón subió por el camino de los que habitaban en tiendas al este de Noba y Jogbeha, y atacó el campamento cuando el campamento estaba desprevenido.

Entonces Gedeon fue a los hombres de Sucot y les dijo: ``Aquí están Zeba y Zalmuna, acerca de los cuales ustedes me injuriaron, diciendo: ` ¿Están ya las manos de Zeba y Zalmuna en tu mano para que demos pan a tus hombres que están fatigados?'"

Después dijo a Zeba y a Zalmuna: `` ¿Qué clase de hombres {eran} los que ustedes mataron en Tabor?" ``Eran como tú," respondieron ellos, ``cada uno parecía hijo de rey."

``{Eran} mis hermanos," dijo él, ``hijos de mi madre. Vive el SEÑOR, que si los hubieran dejado con vida, yo no les quitaría la vida a ustedes."

Entonces Zeba y Zalmuna dijeron: ``Levántate tú y cae sobre nosotros; porque como es el hombre, así es su fortaleza (valentía)." Y se levantó Gedeón y mató a Zeba y a Zalmuna, y tomó los adornos de media luna que sus camellos llevaban al cuello.

``Quisiera pedirles," Gedeón les dijo, ``que cada uno de ustedes me dé un zarcillo de su botín" (pues tenían zarcillos de oro, porque eran Ismaelitas).

El peso de los zarcillos de oro que él pidió fue de 1,700 {siclos} (19.4 kilos) de oro, sin contar los adornos de media luna, los pendientes y los vestidos de púrpura que {llevaban} los reyes de Madián y sin contar los collares que {llevaban} sus camellos al cuello.

Y tuvo setenta hijos que fueron sus descendientes directos, porque tuvo muchas mujeres.

La concubina que {tenía} en Siquem también le dio un hijo, y le puso por nombre Abimelec.

Así que los Israelitas se olvidaron del SEÑOR su Dios que los había librado de manos de todos sus enemigos en derredor.

Tampoco mostraron bondad a la casa de Jerobaal, {es decir,} Gedeón, conforme a todo el bien que él había hecho a Israel.

``Hablen ahora a oídos de todos los habitantes de Siquem: ` ¿Qué es mejor para ustedes, que todos los hijos de Jerobaal, setenta hombres, reinen sobre ustedes, o que reine sobre ustedes un solo hombre?' Además, acuérdense que yo soy hueso y carne de ustedes."

Le dieron setenta {piezas} de plata de la casa de Baal Berit, con las cuales Abimelec tomó a sueldo hombres indignos y temerarios que lo siguieron.

Y se reunieron todos los habitantes de Siquem y todo Bet Milo, y fueron e hicieron rey a Abimelec, junto a la encina del pilar que había en Siquem.

Cuando se lo informaron a Jotam, fue y se paró en la cumbre del Monte Gerizim, y alzando su voz, clamó y les dijo: ``Escúchenme, habitantes de Siquem, para que los oiga Dios.

"Pero la vid les respondió: ` ¿He de dejar mi vino nuevo, que alegra a Dios y a los hombres, para ir a ondear sobre los árboles?'

si han, pues, procedido hoy en verdad e integridad {para} con Jerobaal y su casa, regocíjense en Abimelec, y que él también se regocije en ustedes.

para que viniera la violencia hecha a los setenta hijos de Jerobaal, y recayera la sangre de ellos sobre su hermano Abimelec que los mató, y sobre los habitantes de Siquem que fortalecieron las manos de él para matar a sus hermanos.

Los habitantes de Siquem pusieron emboscadas contra él en las cumbres de los montes y robaban a todos los que pasaban cerca de ellos por el camino; y se lo hicieron saber a Abimelec.

Entonces Gaal, hijo de Ebed, dijo: `` ¿Quién es Abimelec y quién es Siquem para que le sirvamos? ¿No es acaso hijo de Jerobaal, y {no es} Zebul su oficial? Sirvan a los hombres de Hamor, padre de Siquem; pero ¿por qué hemos de servirle a él?

"Ahora pues, levántate de noche, tú y el pueblo que está contigo, y pon emboscada en el campo.

"Y en la mañana, en cuanto salga el sol, te levantarás temprano y atacarás la ciudad. Entonces, cuando Gaal y el pueblo que está con él salga contra ti, harás con ellos lo que te venga a mano."

Abimelec y todo el pueblo que {estaba} con él, se levantaron de noche y pusieron emboscada contra Siquem con cuatro compañías.

Gaal, hijo de Ebed, salió y se paró a la entrada de la puerta de la ciudad. Y Abimelec y el pueblo que {estaba} con él salieron de la emboscada.

Pero Gaal volvió a hablar y dijo: ``Veo gente que baja de la parte más alta de la tierra, y una compañía viene por el camino de la encina de los adivinos."

Entonces Zebul le dijo: `` ¿Dónde está ahora tu jactancia con la cual decías: ` ¿Quién es Abimelec para que le sirvamos?' ¿No es éste el pueblo que despreciabas? Ahora pues, sal y pelea contra él."

Y Abimelec se quedó en Aruma, pero Zebul expulsó a Gaal y a sus parientes para que no se quedaran en Siquem.

Entonces Abimelec y la compañía que {estaba} con él se lanzaron con ímpetu y se situaron a la entrada de la puerta de la ciudad, y las otras dos compañías se lanzaron contra todos los que {estaban} en el campo y los mataron.

Y peleó Abimelec contra la ciudad todo aquel día, capturó la ciudad y mató a la gente que {había} en ella. Entonces arrasó la ciudad y la sembró de sal.

Y le informaron a Abimelec que todos los habitantes de la torre de Siquem estaban reunidos.

Abimelec subió entonces al Monte Salmón, él y toda la gente que {estaba} con él; y tomando Abimelec un hacha en su mano, cortó una rama de los árboles, la levantó y {la} puso sobre su hombro. Y dijo a la gente que {estaba} con él: ``Lo que me han visto hacer, apresúrense {y} hagan lo mismo."

Y todo el pueblo cortó también cada uno su rama y siguió a Abimelec, y {las} pusieron sobre la fortaleza; prendieron fuego a la fortaleza sobre los que estaban {adentro,} y murieron también todos los de la torre de Siquem, como 1,000 hombres y mujeres.

Entonces él llamó apresuradamente al muchacho que era su escudero, y le dijo: ``Saca tu espada y mátame, no sea que se diga de mí: `Una mujer lo mató.'" Y el muchacho lo traspasó, y murió.

Cuando los hombres de Israel vieron que Abimelec había muerto, cada cual se fue para su casa.

Así pagó Dios a Abimelec por la maldad que había hecho a su padre al matar a sus setenta hermanos.

{Este} tuvo treinta hijos que cabalgaban en treinta asnos, y tenían treinta ciudades en la tierra de Galaad que se llaman Havot Jair (las aldeas de Jair) hasta hoy.

Y ellos afligieron y quebrantaron a los Israelitas ese año. Y por dieciocho años {oprimieron} a todos los Israelitas que {estaban} al otro lado del Jordán, en Galaad, en la tierra de los Amorreos.

"Vayan y clamen a los dioses que han escogido; que ellos los libren en el tiempo de su aflicción."

Los Israelitas respondieron al SEÑOR: ``Hemos pecado, haz con nosotros como bien te parezca. Sólo te rogamos que nos libres en este día."

Y el pueblo, los jefes de Galaad, se dijeron unos a otros: `` ¿Quién es el hombre que comenzará la batalla contra los Amonitas? El será caudillo de todos los habitantes de Galaad."

Después de cierto tiempo sucedió que los Amonitas pelearon contra Israel.

Y dijeron a Jefté: ``Ven y sé nuestro jefe para que peleemos contra los Amonitas."

Entonces Jefté contestó a los ancianos de Galaad: `` ¿No me odiaron y me echaron de la casa de mi padre? ¿Por qué, pues, han venido a mí ahora cuando están en apuros?"

Y los ancianos de Galaad dijeron a Jefté: ``Por esta causa hemos vuelto a ti: para que vengas con nosotros y pelees contra los Amonitas y seas jefe sobre todos los habitantes de Galaad."

Y envió Jefté mensajeros al rey de los Amonitas para que le dijeran: `` ¿Qué hay entre usted y yo, que ha venido a mí para pelear contra mi tierra?"

que le dijeron: ``Así dice Jefté: `Israel no tomó la tierra de Moab, ni la tierra de los Amonitas.

entonces Israel envió mensajeros al rey de Edom diciéndole: ``Permítanos, le rogamos, pasar por su tierra," pero el rey de Edom no los escuchó. También enviaron {mensajeros} al rey de Moab pero él no consintió, así que Israel permaneció en Cades.

~`Puesto que el SEÑOR, Dios de Israel, expulsó a los Amorreos de delante de su pueblo Israel, ¿va usted a poseerla?

~` ¿No posee usted lo que Quemos, su dios, le ha dado para poseer? De modo que todo el territorio que el SEÑOR nuestro Dios ha desposeído delante de nosotros, lo poseeremos.

~`Ahora pues, ¿es usted mejor que Balac, hijo de Zipor, rey de Moab? ¿Acaso luchó él con Israel, o acaso peleó contra ellos?

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Las citas bíblicas son tomadas Nueva Biblia de los Hispanos © 2005 by The Lockman Foundation, La Habra, Calif, http://www.lockman.org. Usadas con permiso